- El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, iniciará mañana jueves con el líder del PP, Pablo Casado, una ronda de contactos con los representantes de todos los partidos con representación parlamentaria, para empezar a buscar un acuerdo de reconstrucción, los denominados nuevos Pactos de la Moncloa, tras la pandemia de coronavirus.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, ha anunciado el inicio de esta ronda que irá de mayor a menor por representación en el Congreso y que tendrá lugar el jueves y el viernes.

Después, y cuando ya el PP se había quejado por no haber sido contactado aún por Moncloa para concretar esta cita, Montero confirmó que el Ejecutivo no había aún llamado a los populares, al señalar que el presidente quiere tener esas reuniones y que los gabinetes se pondrían en contacto para buscar la hora más conveniente para Sánchez y Casado.

Ya entrada la noche, el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, aseguró que le "consta" que los equipos del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y del presidente del PP, Pablo Casado, habían contactado para fijar la reunión. El ministro del Interior había afirmado antes que estaba convencido de que se había solicitado la presencia de Pablo Casado en Moncloa en los términos que se hacen habitualmente. Y añadió que le constaba objetivamente que desde Presidencia y propio presidente del Gobierno se ha expuesto la necesidad de iniciar ya los contactos con agentes políticos y sociales con el fin de enfrentar la necesaria reconstrucción económica y social del país.

Este malestar supone el último capítulo de un desencuentro en el que el presidente popular reprochó ayer mismo al líder socialista que en 24 días solo han hablado por teléfono "un par de minutos", lo que se suma a sus dudas por el contenido de estos pactos. Antes de la rueda de prensa de Montero, Pablo Casado puso sus cartas sobre la mesa y propuso consensuar un "plan de choque urgente" sobre material sanitario, test y ayudas para los desempleados y las personas que "peor lo están pasando" por la pandemia. En una visita al Centro de Pantallas de Control de Madrid, planteó por ello dejar para después los Pactos de la Moncloa que están sobre la mesa.

La intención del Gobierno es que ese diálogo se extenderá después a los agentes sociales y a las comunidades autónomas o los ayuntamientos.

La ministra portavoz dejó asimismo claras las líneas rojas del Gobierno de coalición: Sánchez no prevé romper con el líder de Unidas Podemos y vicepresidente segundo Pablo Iglesias y los acuerdos supondrán aprobar los Presupuestos para ponerlos en marcha. También pidió a Casado que acuda al encuentro en Moncloa sin poner ninguna condición y con "espíritu constructivo y de arrimar el hombro". "No se trata del cortoplacismo, sino de tener altura de miras", subrayó Montero.

La alusión a que se mantendrá el acuerdo de gobierno con Unidas Podemos era una respuesta directa a la fundación FAES que preside José María Aznar, que emplazó a Pablo Casado a acudir a la cita con Pedro Sánchez pero con un pacto PSOE-PP como primer punto entre los temas a tratar. "Si Sánchez plantea los pactos como una forma de apuntalar su fórmula de gobierno con Podemos y los demás acompañantes, simplemente fracasará", asegura FAES en el editorial titulado Hablando de pactos. Alerta de que "sería inadmisible aprovechar la crisis para abrir la Constitución, o para supuestos nuevos arreglos territoriales que estarían condicionados por las urgencias confederales del PNV y por el secesionismo de los nacionalistas catalanes". Sin embargo, la forma de dar a conocer el inicio de la ronda de contactos ha supuesto una primera piedra en el camino entre el Ejecutivo de Sánchez y el PP. Tanto es así que fuentes de Génova citadas por Europa Press aseguraron ayer que "este partido ha tenido una trayectoria institucional demasiado relevante en los últimos 40 años como para consentir más desplantes e insultos de este Gobierno".

Reivindicaron que esta ronda se lleve a cabo "a través de un acuerdo previo con un mínimo de respeto al principal partido de la oposición" y censuraron que esta forma de proceder de Pedro Sánchez "demuestra su nula voluntad de pacto", así como "una arrogancia e incapacidad que dificulta cualquier colaboración con la oposición". "Cuando nos llamen para ver la agenda, se decidirá" si Casado acude, zanjaron.

Pide amparo a Batet. EH Bildu se dirigió ayer a la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, para pedir amparo ante las amenazas del Sindicato Unificado de Policía (SUP) al diputado de la formación Jon Iñarritu. El grupo se refería a lo sucedido el 12 de abril, cuando el diputado se hizo eco en redes sociales de una respuesta a una interpelación parlamentaria según la cual se repartieron 1.200 pistolas eléctricas entre las fuerzas de seguridad del Estado. Según Bildu, "el SUP respondió a dicha información invitando al diputado vasco a hacerle una demostración de estas armas e incluso a probar sus efectos", lo que calificó de "inaceptable e inaudito".

"Sánchez busca un escudo político frente

a una debacle sanitaria, económica y social"

Portavoz del PP en el Congreso

"No se trata solo de acudir a esta cita sino de hacerlo con el espíritu de arrimar el hombro"

Portavoz del Gobierno