- Elecciones habemus. Todo apunta a que los vascos de la CAV estarán convocados a las urnas a mediados de julio para renovar el Parlamento de Gasteiz disuelto desde febrero, del que saldrá un nuevo Gobierno Vasco que habrá de gestionar la devastadora crisis sanitaria, social y económica generada por la pandemia de la covid-19. El lehendakari Urkullu reunió ayer a los partidos para presentarles sus opciones en torno a las fechas posibles y escuchar sus aportaciones. Se guardó la fecha y habrá que esperar unos días para conocerla, aunque las dos opciones principales son 12 y 19 de julio. Además de la fecha se guarda en la recámara una bala por si una evolución negativa de la pandemia obligara a volver a aplazarlas de nuevo. En este caso, el plan B sería septiembre.

El lehendakari volvió a insistir a los partidos en la necesidad de celebrar las elecciones autonómicas en julio apoyándose en los informes técnicos que predicen una mejor situación sanitaria y epidemiológica durante ese mes. Urkullu considera urgente la celebración de los comicios porque pondría fin a la interinidad del Ejecutivo tras la disolución del Parlamento Vasco por la convocatoria de las elecciones para el 5 de abril, que finalmente no pudieran celebrarse por la pandemia, al igual que en Galicia.

Las urnas devolverían la normalidad política e institucional y su celebración en julio agilizaría los tiempos de conformación del Parlamento y del Gobierno vascos, con lo que el Ejecutivo resultante podría afrontar la gestión de la crisis con total legitimidad.

La mesa de partidos vascos tuvo lugar en Lehendakaritza y en ella participaron también los líderes de los cinco partidos representados en el Parlamento -Andoni Ortuzar (PNV), Maddalen Iriarte (EH Bildu), Miren Gorrotxategi (Elkarrekin Podemos), Idoia Mendia (PSE) y Carlos Iturgaiz (PP)- así como el dirigente de Equo Berdeak José Luis Becerra.

El lehendakari explicó que este es el momento de "valorar" la celebración de las elecciones en julio, porque, "si la evolución de la pandemia sufriese un retroceso" y fuera necesario volver a aplazarlas, aún quedaría "la opción alternativa de septiembre-octubre", señaló el portavoz del Gobierno, Josu Erkoreka, tras el encuentro de Urkullu con las formaciones. "Dentro de unos días solo tendremos un escenario posible. Ahora contamos con dos y se puede elegir", subrayó, al tiempo que aseguró que la decisión sobre la fecha electoral "no está tomada en absoluto". Erkoreka precisó que no habrá más reuniones para tratar el tema y que, una vez oídos los planteamientos de los partidos, Urkullu tomará y comunicará su decisión.

En todo caso, antes de convocar las elecciones se deberá levantar la declaración de emergencia sanitaria, algo que depende del Departamento vasco de Salud. Erkoreka recordó, no obstante, que ya se ha derogado buena parte de las disposiciones que "daban sustento" a esa declaración, como las órdenes que limitaban movilidad, mercados y funerales.

Otro requisito previo a la convocatoria electoral es escuchar las consideraciones al respecto del Consejo de Gobierno, cuya próxima reunión ordinaria será el próximo martes. Cabe, sin embargo, la posibilidad de que el lehendakari convoque una sesión extraordinaria "en cualquier momento". La ley electoral establece que el decreto de elecciones ha de publicarse 54 días antes de la celebración de los comicios, por lo que el lehendakari tiene hasta el próximo lunes o martes para tomar una decisión si quiere fijar la cita con las urnas el 12 de julio, aunque tampoco se descarta el 19 de julio como jornada electoral. Menos opciones tendría el 26 de julio, ya que la víspera es festividad de Santiago.

La otra fecha que baraja el lehendakari es septiembre e incluso octubre, ya que legalmente el Gobierno vigente caduca su legislatura natural el 25 de octubre, cuatro años y un mes después de las últimas elecciones.

La propuesta del lehendakari a los partidos se apoya en tres informes, uno jurídico, otro sanitario y un tercero relativo a la seguridad en las votaciones. Estos documentos subrayan la idoneidad celebrar las elecciones en verano, cuando se espera que la situación sanitaria esté bajo control y la curva de contagios se encuentre en sus números más bajos. Es un escenario que, según estos informes, no se podría garantizar en invierno-otoño, ni siquiera en septiembre-octubre, ya que los expertos no descartan un rebrote de los contagios.

En el encuentro, el lehendakari planteó las condiciones necesarias para celebrar los comicios, como la garantía de control de la pandemia y de capacidad sanitaria para responder a su evolución previsible, la garantía de contar con todos los servicios públicos que permitan el acceso a toda la sociedad a su derecho al voto, así como un plan de seguridad y protección de la campaña y de la jornada electoral. En el informe redactado del Departamento de Seguridad del Gobierno vasco se propone auspiciar el voto por correo y facilitar el de las personas que no puedan acudir físicamente a las urnas por la pandemia del coronavirus. En el voto presencial en los colegios electorales, pide garantizar las medidas de distanciamiento físico y de protección e higiene que marquen las autoridades sanitarias, tanto para el personal electoral como para el electorado.

Además, reclama que se habilite por la Junta Electoral Central de un procedimiento para el voto por correo de las personas confinadas, en cuarentena, hospitalizadas, similar al existente en las prisiones, en el que el personal de Correos se desplaza al domicilio, residencia u hospital. La persona interesada llamaría al INE para expresar su voluntad de votar por correo, éste prepararía la solicitud, junto con toda la documentación para poder votar y el personal de Correos llevaría toda la documentación.

Todos partidos mantuvieron ayer las posturas ya conocidos, salvo el PP de Carlos Iturgaiz que ha virado tras el anuncio del presidente de la Xunta de Galicia de que quiere celebrar cuanto antes las elecciones gallegas por razones muy parecidas a las de Urkullu. Ahora, los recelos iniciales de Iturgaiz han dado paso a condicionar los comicios a garantizar la seguridad sanitaria y democrática de la cita. EH Bildu y Elkarrekin Podemos rechazan el mes de julio por razones sanitarias, mientras que PNV, PSE y Equo Berdeak abogan por convocarlas con garantías sanitarias y democráticas.

Julio. Por plazos hay tres opciones: 12, 19 o 26 de julio, aunque en contra de esta última estaría el que la víspera es festivo por Santiago. Para celebrarlas el día 12 el lehendakari debería firmar el decreto de elecciones antes del próximo martes.

Septiembre. No es la opción preferida por el lehendakari pero la está sopesando y, en cualquier caso, serviría como segunda oportunidad si la primera (julio) fallase por una negativa evolución de la pandemia ese mes.