- Los cinco dirigentes de la izquierda abertzale condenados por el caso Bateragune reclamarán una indemnización al Estado tras la anulación de la sentencia por la que cumplieron seis años de cárcel, además de la inhabilitación para cargo público.

El Tribunal Supremo anuló el viernes la sentencia del caso Bateragune después de que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) condenase a España por la parcialidad de una jueza. El coordinador de EH Bildu, Arnaldo Otegi, el exdirigente sindical Rafa Díez, Miren Zabaleta, Sonia Jacinto y el secretario general de Sortu, Arkaitz Rodríguez, cumplieron penas de seis y seis años y medio de prisión, ademas de ser inhabilitados para cargo público. Por ello, el abogado de los cinco, Iñigo Iruin, anunció ayer en San Sebastián que los cinco condenados presentarán una reclamación de indemnización al Estado por "error judicial".

El abogado señaló que la Ley Orgánica del Poder Judicial establece que en el caso del "error judicial" no es necesario otra sentencia que reconozca ese error porque el fallo de ayer del Supremo ya lo hace de forma "tácita", por lo que reclamarán la "responsabilidad patrimonial del Estado" y la indemnización correspondiente, para lo que tienen un plazo de un año. Iruin explicó que las sentencias del Tribunal de Estrasburgo son "jurídicamente obligatorias" para los Estados pero "no ejecutivas", por lo que son los tribunales nacionales los que deben establecer cómo se aplican.

El fallo del TEDH consideró que hubo una vulneración de los derechos de Otegi al ser juzgado por un tribunal "no imparcial" y ahora el Supremo ha declarado la "nulidad total" del proceso en la Audiencia Nacional y el propio TS, lo que incluye a los otros cuatro condenados. "No debieron ser condenados en ningún caso", sostuvo el abogado.

Por su parte, Arnaldo Otegi consideró "curioso" que el fallo del Supremo se produzca "quince días después" de haberse celebrado las elecciones vascas, en las que no pudo ser candidato. "Seguramente han tenido que alargar las deliberaciones para escribir un folio" de sentencia que aplicara el fallo de hace dos años del Tribunal de Estrasburgo, ironizó.

El dirigente abertzale opinó que este caso fue una "operación de Estado, urdida por los aparatos del Estado con un gobierno del PSOE", que buscaba "impedir que la izquierda abertzale cambiara de estrategia" abandonando la lucha armada, "dividir" a la izquierda abertzale encarcelando a los que consideraban sus "activos más importantes" y "destruir el proyecto de la izquierda independentista". Asimismo, recordó que hace diez años la izquierda abertzale estaba ilegalizada y ahora EH Bildu "es la primera fuerza municipalista" en la CAV y Navarra y tiene un "crecimiento homogéneo en los siete territorios" (lo que incluye el País Vasco francés). "La lectura es bien sencilla, hoy ellos son más débiles y la izquierda independentista es más fuerte, ha sido una victoria jurídica y política", mantuvo.

Otegi dijo que los cinco han "pagado un precio muy duro" pero están "muy satisfechos". "Hicimos lo que teníamos que hacer, era el precio que había que pagar por tratar de construir un escenario mejor", añadió en la rueda de prensa, en la que le acompañaron Rafa Díez y Miren Zabaleta.

Por otro lado, realizó un "emplazamiento" a quienes "se pasan la vida pidiendo autocríticas, al Estado". "¿Cuándo va a hacer una apuesta por las vías pacíficas y democráticas? ¿Cuándo va a entender que es legítimo defender la unidad de España pero hay que hacerlo con argumentos democráticos y no con la violencia? ¿Cuándo va a decir que la tortura ha sido una estrategia estructural? ¿Cuándo va a aceptar que los vascos tenemos derecho a decidir", preguntó.

Por último, Otegi consideró que es "un buen día para recordar al conjunto de presos políticos, deportados y refugiados", y se ha referido a la situación de la expresa de ETA Miren Itxaso Zaldua Iriberri, detenida días atrás en Hernani por su presunta participación en el asesinato del presidente del Partido Popular de Aragón, Manuel Giménez Abad. "Se le hacen graves acusaciones porque hay un testigo protegido que nadie conoce y que dice que le ha visto no sabemos dónde... Este es el nivel de la justicia en el Estado español. ¿Cuánta gente está en la cárcel con pruebas construidas en las cloacas del Estado?", cuestionó.

En el origen del recurso de los condenados al TEDH está la respuesta que dio esta magistrada, Ángela Murillo, cuando Otegi, en la vista de una causa anterior, no quiso contestar si condenaba la violencia: "Ya sabía yo que no me iba a responder a esa pregunta". A lo que Otegi replicó: "Yo también sabía que lo iba a preguntar".

La Audiencia Nacional condenó a Otegi entonces a dos años de cárcel por enaltecimiento del terrorismo. Él recurrió la parcialidad de Murillo y el Supremo le dio la razón. Otra Sala de la Audiencia lo absolvió en la repetición del juicio. Dos meses después, en el juicio por Bateragune se repitió la recusación contra Murillo pero esta vez sin éxito. Para Estrasburgo, aceptar la primera recusación de la jueza por parcialidad contra Otegi en un caso y rechazarla en otro procedimiento diferente contra él solo unos meses después vulneró el Convenio Europeo de Derechos Humanos.

Las detenciones. Tras la entrada en vigor de la Ley de Partidos, en 2003, el Tribunal Supremo ilegalizó Batasuna alegando un vínculo con ETA. Asimismo, el juez Baltasar Garzón ordenó el arresto de 23 personas en 2007 y otras 14 en 2008. En octubre de 2009, Otegi, Díez, Rodríguez, Jacinto y Zabaleta fueron encarcelados.

La creación de Sortu. En febrero de 2011, la izquierda abertzale presentó los estatutos para la creación de Sortu en Bilbao en los que apostó por la vía pacífica. En junio de ese mismo año, comenzó en la Audiencia Nacional el juicio por el caso Bateragune.

La sentencia y los recursos. La sentencia condenó a Otegi y a Díez a diez años de prisión, y a Jacinto, Zabaleta y Rodríguez a ocho. En 2012, el Supremo rebajó sendas penas a seis años y medio y seis años. En 2013, el Constitucional admitió a trámite los recursos de amparo pero decide mantener en prisión a los cinco.

El revés judicial europeo. En 2018, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos dictaminó que Arnaldo Otegi, Rafa Díez, Sonia Jacinto, Miren Zabaleta y Arkaitz Rodríguez no tuvieron un juicio imparcial y que se vulneró el artículo 6.1 de la Convención Europea de Derechos Humanos, que establece el derecho a un juicio justo.

"Hicimos lo que había que hacer, era el precio que había que pagar por tratar de construir un escenario mejor"

Coordinador de EH Bildu

"La falta de imparcialidad

del proceso es evidente, en ningún momento debieron ser condenados"

Abogado de los cinco condenados