El portavoz de Eusko Alkartasuna, Iker Ruiz de Egino, ha reclamado a los de Navarra y la CAV que trabajen con la oposición, sindicatos y agentes sociales en el diseño de un plan común que haga frente a la situación generada por el covid-19.

En un artículo publicado en su página web, el portavoz de la formación integrada en EH Bildu reconoce que debido a la pandemia nos encontramos ante una situación "tan nueva y desconcertante que el trabajo habitual es más difícil que de costumbre".

Sin embargo, advierte de que las "instituciones mayores", a quienes compete preparar la vuelta a los colegios, han tenido tiempo desde que terminó el anterior curso escolar para preparar la vuelta a clase y la segunda ola del covid-19, pero "no lo han hecho". "Podemos ser tajantes en esta afirmación porque los hechos y realidades así lo demuestran: no lo han hecho", subraya.

En este sentido, afirma que desde Eusko Alkartasuna no ponen en duda que si los trabajadores de la Educación, que han realizado un "esfuerzo ímprobo durante los meses de clases 'online'", han respondido con una huelga al inicio de curso en la CAV, ha sido con el objetivo de llamar la atención sobre "la situación que viven y sufren en sus centros de trabajo".

"Otro tanto se puede decir de los trabajadores del sector sanitario: esos héroes a los que salíamos a aplaudir a las 8 de la tarde no se han convertido en villanos que quieren fastidiar al recién creado Gobierno vasco", añade.

SECTOR PUBLICO "DEBILITADO"

A su juicio, el principal problema es el hecho de partir de un sector público "muy debilitado" y que lleva reflejando "síntomas de estrés y de riesgo de fractura por mala gestión desde hace tiempo". "Las huelgas de las trabajadoras de las residencias, las OPEs masivas anunciadas por las instituciones, los cierres de servicios sanitarios en fines de semana... son síntomas de los problemas existentes", ejemplifica.

Tras indicar que el "40% del total del personal que trabaja en el sector público de Hego Euskal Herria es eventual", advierte de que en la Unión Europea la media de personas trabajadoras que desempeñan su labor para el sector público es del 20%, mientras que en la CAV "solo llega al 12%".

También lamenta Ruiz de Egino la situación del sector público sanitario en Navarra, que ha sido "desmantelado sistemáticamente durante años por la derecha". "Ese diseño del sector público responde a decisiones ideológicas, no a la falta de dinero. Seguir haciendo las mismas políticas no es una opción válida. Hace falta voluntad e ideas. Desde EA y desde EH Bildu aportamos las dos cosas, porque no es cuestión de dinero, sino de prioridades", argumenta.

En este sentido, manifiesta que en la Ertzaintza "no hay interinidad y hay partidas que nunca se recortan" y sostiene que la consejera Arantxa Tapia "pidió a Madrid que no suspendiera las adjudicaciones de las obras del TAV en pleno confinamiento", pese a que "no son la primera preocupación de la mayoría social".

"Por eso, en estos momentos necesitamos gobernantes capaces de trabajar con planes adecuados, estrategias que miren en el medio plazo y el futuro", señala, para añadir que es "evidente" que hay que dar respuesta a las necesidades del curso escolar en el que el covid-19 convivirá con la gripe anual, los catarros y el resto de las enfermedades, "dificultando mucho el trabajo del personal sanitario".

"NUESTRA AYUDA"

De este modo, y tras señalar que el diseño del sector público "no ha dado buenos resultados", aboga por "plantear cambios de calado" y subraya que "en ese camino los ejecutivos van a tener ayuda, la nuestra, sin ir más lejos".

Por todo ello, considera que los gobiernos navarro y de la CAV se enfrentan a un reto que "no pueden hacer solos", de tal forma que "el Auzolan con la participación de la oposición, sindicatos y agentes sociales, es siempre preferible, pero en esta ocasión, además, es necesario". "Desde un punto de vista de inteligencia política también es recomendable, por aquello de que si nos equivocamos, nos equivocamos todos y si acertamos, también", expresa.

Así, cree que es "imprescindible" que gobiernos, oposición, sindicatos y agentes sociales juntos diseñen el plan que haga frente a "la etapa que vivimos".