Tampoco será en octubre. La transferencia de Tráfico y Seguridad Vial, que este mes debía haberse materializado en la comisión mixta de transferencias entre Navarra y el Estado, sigue sin fecha, según confirman fuentes del propio Gobierno foral. Y no parece probable que se vaya a celebrar en breve. La situación sanitaria, la negociación presupuestaria o la gestión de los fondos europeos ocupan ahora la prioridad del Gobierno central, que de momento sigue sin dar el paso definitivo.
El Gobierno de Navarra en cualquier caso se muestra optimista. Hay ya trabajo adelantado, por lo que confía en que, más pronto que tarde, se convocará la reunión bilateral donde se tiene que acordar los términos en los Navarra acometerá la gestión exclusiva de Tráfico y Seguridad Vial. Tanto el cronograma -se trata de un proceso progresivo que el Ejecutivo foral ha cifrado en cinco años- como en el coste que la nueva competencia tendrá para las arcas de la Hacienda Foral y, por lo tanto, lo que deberá descontar de su aportación anual al Estado vía Convenio Económico. Navarra tiene la parte del trabajo ya adelantada, por lo que solo falta la firma definitiva que reconozca a la Comunidad Foral la gestión exclusiva una competencia histórica.
Dos años de retraso La devolución de la autoridad exclusiva sobre las carreteras es una demanda antigua de Navarra que los distintos Gobiernos de España, con mayor o menor entusiasmo, se han comprometido a ejecutar, pero que nunca se ha cumplido. La poca voluntad política en Madrid por cumplimentar una competencia reconocida en el Amejoramiento y que ya ejercen Catalunya y la CAV, y el rechazo que la medida siempre ha generado en la cúpula de Interior han acabado frustrando el proceso.
La última promesa es de hace ya casi dos años. El 31 de octubre en una reunión bilateral entre la entonces presidenta del Gobierno Uxue Barkos y el presidente Pedro Sánchez, ambas administraciones acordaron materilizar el traspaso “antes del final de la legislatura”, fijado para mayo de 2019.
Sin embargo, la coyuntura política en Madrid, con un adelanto electoral previsto en aquellos meses, acabó por dilatar el proceso sin fecha. Fue el pasado año, tras el acuerdo de investidura entre el PSOE y el PNV cuando se fijó el mes de junio como fecha efectiva de traspaso. Plazo que, con el argumento de la pandemia, finalmente se pospuso hasta el actual mes de octubre. Algo que tampoco ocurrirá y que, en el mejor de los casos, queda para “las próximas semanas”, según apuntaba ayer en Diario de Navarra el Delegado del Gobierno, José Luis Arasti.
Una fecha indefinida que no alienta las esperanzas de una aceleración de los trámites pendientes, salvo que la negociación presupuestaria en el Estado sirva de catalizador. De momento, el Gobierno central ha aplazado al próximo año el traspaso de las competencia de Prisiones y Seguridad Social a Euskadi.
imv y sanidad penitenciaria El retraso de Tráfico también afecta a las competencias en Sanidad Penitenciaria y el Ingreso Mínimo Vital. La primera esta ya avanzada, pero se acometerá al mismo tiempo que Tráfico. Mientras que el IMV, el equivalente a la Renta Garantizada, se sigue tramitando de forma separada. Navarra tenía previsto acordar este mes una encomienda de gestión que finalmente se ha descartado para negociar directamente la trasferencia de la competencia. Algo que deberá tenerse muy en cuenta en la negociación del Convenio Económico para que el IMV no perjudique económicamente a Navarra.
