El exlehendakari Carlos Garaikoetxea (EA) ha rechazado este domingo una "integración", que no una "cooperación", de EA en el seno de la coalición EH Bildu que lleve a la "confusión con pensamientos y doctrinalismos incompatibles, como pueden ser los del socialismo marxista con la socialdemocracia democrática".

En el acto de homenaje a Joseba Elosegi e inicio del curso político, organizado por Eusko Alkartasuna de San Sebastián, Garaikoetxea, acompañado del coordinador de EA en la capital guipuzcoana, Jabier Estebanez, ha afirmado que le da "pena que no hubiera un Homero o un Virgilio euskaldún en la época de Elosegi" para relatar la "epopeya" de sus vivencias.

La cita ha tenido lugar en el mirador Joseba Elosegi, en el alto de San Bartolomé de la capital guipuzcoana, donde familiares del homenajeado, como sus hijos, sobrinos y su nieta, han recibido un obsequio de reconocimiento.

Tras repasar la trayectoria de Elosegi, fallecido en 1990 a la edad de 74 años, de lucha contra el nazismo y el franquismo y por los valores democráticos, Garaikoetxea ha recordado cómo colocó una ikurriña en la torre de la catedral del Buen Pastor en 1946, en "los años más negros del franquismo" y ha puesto en valor que "sus convicciones pasaban por el sacrificio propio pero no por sacrificar la vida de los demás invocando la política".

En este sentido, ha subrayado que "supo poner en riesgo su vida y dio una lección a todos los que empezábamos la vida democrática o semidemocrática de este país cuando dijo que jamás objetivos políticos por el recurso a la violencia, la muerte y el terror". Elosegui fue militante del PNV, capitán de gudaris del batallón Saseta, comandante del ejército republicano en Cataluña, combatió en el ejército republicano durante la Guerra Civil española, fue senador jeltzale y afiliado de EA desde 1986.

Garaikoetxea ha incidido en que Elosegi "no consintió connivencia alguna con la estrategia de la violencia para eliminar o combatir al enemigo político", lo cual supuso una "lección muy importante, tanto para EA como para otros en los aledaños políticos".

Tras referirse a Elosegi como un hombre "generoso", ha puesto en valor que ofreció un "espaldarazo y refuerzo" a la "convicción" de que EA iba "por el camino adecuado" en la "defensa de los Derechos Humanos por encima de cualquier consideración, el respeto a la vida y jamás el recurso a la violencia contra adversarios políticos por serlo", así como "las vías democráticas, pacíficas de un hombre que tuvo que luchar tanto por los ideales de una Euskal Herria libre y el derecho a la autodeterminación desde una perspectiva no dogmática, sino realista y generosa".

En este contexto Garaikoetxea ha reconocido que EA atraviesa "momentos complicados", porque "algunos por confusión o peor voluntad están pretendiendo confundir lo que Elosegi siempre hubiera respaldado, la cooperación, el esfuerzo compartido en pos de la defensa de los derechos nacionales del pueblo vasco, pero no la confusión, la integración o compartir ideologías incompatibles con una percepción democrática plena y sin caer, por consiguiente, en la tentación del doctrinamismo marxistoide y confundir una coalición con una integración de manera, más o menos, pensada o conscientemente asimilada".

A su juicio, ese es el "reto" de EA, la "encrucijada", en la que "algunos piensan que ir a una integración en una coalición en la que hay una diversidad ideológica enorme, desde la extrema izquierda de un presidente del partido comunista hasta el predicamiento que hace el secretario general de Sortu del modelo castrista como modelo a seguir".

"Joseba Elosegi no estaba ahí", ha opinado. Sin embargo, ha defendido que hubiera apostado por "construir con generosidad" y por buscar "siempre el progreso" con el fin de "hacer avances realistas en esta sociedad, que tantas injusticias ofrece, y apoyar el proyecto socialdemócrata que defendemos quienes apostamos por la unión de fuerzas en el proyecto nacional vasco".

Así ha rechazado una vez más "una integración", en lugar de "cooperación con objetivos muy concretos", que lleve a la "confusión con pensamientos y doctrinalismos incompatibles como pueden ser los del socialismo marxista con la socialdemocracia democrática".