El movimiento de desobediencia al TAV Mugitu! ha realizado en las últimas semanas pintadas contra la construcción del tren de alta velocidad. Las más recientes han sido en el trazado actualmente en obras, entre Olite y Marcilla. También ha realizado pintadas en lugares como la pasarela del Labrit en Pamplona, según han señalado, "para denunciar la imposición de esta infraestructura, la más destructora, despilfarradora y antisocial de la historia de Euskal Herria". El colectivo ya realizó una acción similar recientemente en Etxabakoitz, donde está previsto que se construya la futura estación.

Mugitu! También ha criticado "el alarde de cinismo político" de Pedro Sanchez, Maria Chivite y la consejera de Desarrollo Económico de la CAV, Arantxa Tapia, por participar en la COP 26 de Glasgow y a los pocos días de anunciar "la propuesta de seguir derrochando el próximo año en este monstruo insaciable 336 millones en la CAV y otros 52 millones en Navarra". A esto, denuncian, hay que añadir los casi 150 millones de los fondos europeos Next Generation que quieren invertir en el corredor navarro del TAV antes del 2026. "¡Basta ya de bla bla bla medio-ambiental! ¡No queremos más marketing verde!", ha reclamado en un comunicado, en el que afirman que "el TAV es el icono principal de un capitalismo terminal que nos arrastra al colapso civilizatorio".