La aprobación definitiva de los Presupuestos Generales de España (PGE) para 2022, que se materializó ayer en el Congreso de los Diputados, es una buena noticia para Navarra. Sobre todo porque tienen comprometida una inversión directa de más de 109 millones, además de otros beneficios importantes para la Comunidad Foral de difícil cuantificación. Entre ellos están los 25 millones del fondo para compensar a las víctimas del amianto de todo el Estado o el anticipo a los 60 años de la edad de jubilación de la Policía Foral.

Inicialmente, el proyecto presupuestario del Gobierno español contenía inversiones en Navarra por valor de 94,1 millones, pero esta cifra ha ido creciendo en el trámite parlamentario con las negociaciones que PNV y EH Bildu, en el Congreso, y Geroa Bai, en el Senado, han conseguido cerrar con el Ejecutivo de Sánchez y con los grupos que lo sostienen, PSOE y Unidas Podemos.

La principal partida de gasto de las Cuentas estatales se destinará a impulsar las obras del corredor navarro del tren de alta velocidad (TAV). Asciende a 52 millones, sin contar los 145,5 millones que recibirá esta infraestructura de los fondos europeos Next Generation para el tramo entre Castejón y Campanas. Unas ayudas estas últimas cuya ejecución se retrasará al menos hasta 2023.

Además, Renfe destinará 4,6 millones a intervenciones tales como reparaciones, actuaciones en estaciones o seguridad en la circulación.

Otras obras que recibirán una importante inyección en 2022 son las de mejora de la N-121-A, para las que desde el Ministerio de Transportes se han reservado 15 millones mediante una transferencia de capital al Ejecutivo foral. También a través de esta fórmula, el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo tiene consignados dos millones de euros para el Centro Nacional de Industrialización y Robótica.

Por su parte, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico contempla para Navarra inversiones por valor de 13,9 millones de euros, de los que 10,8 tienen que ver con la gestión de Yesa y otros 1,2 millones se reservarán para las obras de recrecimiento del pantano.

El Ministerio de Ciencia e Innovación, a través del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, aporta un millón de euros para el Instituto de Agrobiotecnología que tiene su sede en Mutilva.

El resto de ministerios no tienen inversiones previstas en los Presupuestos de 2022.

Navarra también se va a beneficiar, de manera indirecta, de obras en provincias limítrofes. Es el caso de la Autovía del Pirineo, cuya construcción avanza con menos celeridad de la deseada, pero que en el transcurso del año que viene dispondrá de 22,5 millones de euros para el enlace de Sigüés- enlace de Tiermas dentro de la A-21 que conecta Pamplona con Jaca.

Los Presupuestos del Estado también incluyen partidas en Soria y Zaragoza para avanzar en los proyectos de la autovía A-15 entre Soria y Tudela, que acumula ya más de una década de retraso. Y también computan un millón de euros a La Rioja para la licitación y construcción del enlace de Lodosa de la AP-68 para su conversión en un enlace completo.

Ha sido en el Congreso donde las Cuentas Públicas de Sánchez han engordado sus inversiones para Navarra. La de mayor cuantía económica fue la que arrancó el PNV al conseguir cinco millones para equipar el Polo de Innovación Digital de Navarra. Se trata de un proyecto estratégico liderado por el Departamento de Desarrollo Económico del Gobierno foral, que pretende impulsar el desarrollo económico tanto público como del tejido asociativo empresarial navarro para promover la transformación digital de empresas y administración.

Este Polo de Innovación Digital garantiza que las empresas, de cualquier tamaño, tecnológicas o no, puedan aprovechar las oportunidades digitales a través de esta ventanilla única que les ofrece testeo de tecnología antes de la inversión, acompañamiento en la transición digital, transferencia de conocimiento científico-tecnológico y oportunidades de networking.

El PNV también consensuó una partida de 100.000 euros para el Centro de Visitas del Castillo de Amaiur y del Valle de Baztan.

EH Bildu ha sido el otro grupo que más acuerdos ha cerrado con los socios del Gobierno central para incorporar mejoras en los Presupuestos que beneficien a la Comunidad Foral. Entre ellas está una partida de un millón de euros para conectar Vitoria con la vía verde de Plazaola a través de una pista ciclable entre Irurtzun y Agurain, que se unirá a los tramos ya existentes, creando así una vía ciclable verde entre Álava y Navarra.

La coalición soberanista también sumó una partida de medio millón de euros para la redacción del proyecto de la futura variante de Lesaka que descargue el tráfico que soporta esta localidad.

Sin una dotación específica, hay que recordar asimismo el acuerdo alcanzado por EH Bildu para que, antes de que finalice 2022, quede garantizada la captación de ETB-3 -el canal que emite contenido infantil en euskera- en todo el territorio de la Comunidad Foral. Así como el compromiso arrancado al Gobierno de España para que los agentes de la Policía Foral puedan jubilarse, a partir del 1 de enero, a los 60 años e incluso a los 59 con la condición de acreditar 35 años o más de actividad efectiva. Se trataba de una vieja reivindicación que por fin se ve plasmada en un documento.

A última hora, Geroa Bai cerró en el Senado acuerdos con el Gobierno central que garantizan inversiones para Navarra por valor de 17 millones, si bien algunas no se ejecutarán en su totalidad en 2022.

La de mayor cuantía, dotada con casi cinco millones de euros, es para acometer mejoras en el río Ulzama a su paso por Villava.

Otra partida destacable, en este caso de dos millones, es la que se desnará al Centro Nacional de Industrialización y Robotización de la Construcción con sede en Pamplona.

Además, para la puesta en marcha de una vía verde entre Sangüesa y Pamplona siguiendo el trazado del Irati, se ha acordado una dotración inicial de 800.000 euros de los aproximadamente cinco millones de su coste total que financiará el Estado.

Otras partidas negociadas por Geroa Bai son una de 300.000 euros para modernizar la iluminación nocturna del Castillo de Olite y otra de 200.000 euros para el proyecto Fronteras y Hormigón que busca restaurar los búnkeres que Franco mandó construir en el Pirineo para defenderse de una invasión aliada.