Esparza rechaza detallar el contenido del acuerdo alcanzado con el PSOE a cambio del apoyo de UPN a la reforma laboral, tal y como le han reclamado los dos diputados díscolos, que acusan al dirigente regionalista de "mentir a todo el mundo". "Había más acuerdo, por respeto se queda en el ámbito interno", ha afirmado hoy en una entrevista en Radio Euskadi.

Esparza ha asegurado además que el apoyo del PSN a Enrique Maya en el Ayuntamiento de Pamplona para evitar su reprobación y sacar adelatne las modificaciones en el presupuesto municipal son la parte "pequeñita" del acuerdo.

En ese sentido, ha asegurado que la alianza con el PSOE incluía también medidas para el desarrollo económico de Navarra y para mejorar la "convivencia" en Navarra. No ha aclarado sin embargo a qué se refiere UPN cuando habla de convivencia. Ha lamentado no obstante que estos acuerdos han "decaído" con el voto en contra de Sergio Sayas y Carlos García Adanero.

Las relaciones con el PSOE y el PP

Esparza en cualquier caso ha agradecido la "sensatez" de los dirigentes del PSOE y del PSN, a los que ha explicado la situación creada por sus diputados Carlos García Adanero y Sergio Sayas al incumplir el acuerdo alcanzado por la dirección del partido con los socialistas.

Además, ha reiterado que cree a Pablo Casado cuando le dijo que el PP "no los ha comprado" a Adanero y Sayas para que cambiaran su voto y que la coalición Navarra Suma junto a populares y Ciudadanos "sigue trabajando con normalidad".

Tampoco cree que Adanero y Sayas sean tránsfugas ni hayan hablado con Vox, y ha señalado que los dos diputados se han situado "fuera" de UPN al negarse a entregar sus actas. Así, ha dicho que prefiere quedarse sin representación en el Congreso temporalmente que perder la credibilidad como partido. "Somos un partido regionalista, nuestro centro es Navarra y gobernar en Navarra, es una tristeza enorme todo lo ocurrido y prefiero ser un partido que tiene palabra y cumple lo que acuerda", ha añadido.

En su opinión, "nadie" en UPN "ve bien" el "engaño durante 23 horas" de los dos diputados, desde que conocieron el acuerdo con el PSOE y dijeron que acataban la disciplina de voto aunque no lo compartían hasta que votaron en contra de la reforma laboral. "Fue un torpedo en toda la línea de flotación de UPN", ha aseverado Esparza, que ha dicho que cuando conoció la votación se quedó "helado". "Si me corto, no sangro", ha expresado.