Pamplona - Mala temporada para las estaciones de esquí. A la falta de nieve se sumó el pasado lunes un incendio en la cercana estación de la Piedra de Sant Martin (Arette) ocasionado en un telesilla que dejará bastante tocada la estación para el resto de la temporada. En la vertiente navarra la falta de nieve también ha obligado a una situación precaria en Larra-Belagua y a que todavía no se haya podido abrir Abodi. En el estación roncalesa hay esquiables tres kilómetros en La Contienda, espacio que está siendo utilizado desde ayer por los niños y niñas de la campaña escolar de esquí nórdico que acaba de comenzar. Desde Larra-Belagua, una de las pocas abiertas en el Pirineo, se señalaba ayer que no había excesiva confianza en que al cola del frente frío que azota centro Europa deje precipitaciones de importancia por lo que la situación no parece susceptible de muchos cambios. Se trata de un episodio que ya se vivió hace un par de años. Según el parte de la CHE, la reserva de nieve en la cuenca del Aragón hasta Yesa es de 8 hectómetros cúbicos frente a los 147 del año pasado y los 70 de media en los últimos cinco.

Quitando Baqueira Beret o Sierra Nevada, la temporada esta siendo desastrosa en gran parte de las estaciones. En la parte aragonesa se ha podido esquiar en cuatro de sus seis estaciones, Formigal-Panticosa, Cerler y Valdelinares (todas ellas del grupo Aramón) y en Astún, aunque con pocos kilómetros de pistas.

Cerler es la estación del grupo Aramón que más kilómetros esquiables ha ofrecido, más de 34 de un total de 77 kilómetros, mientras que, en la de Formigal-Panticosa, sólo se ha podido practicar este deporte en 10 de un total de 141 de los que dispone. En Astún apenas se han podido usar 16 kilómetros de los 50 que tiene con una nieve entre polvo y dura, según informa Europa Press. - D.N.