BARCELONA. Según ha explicado el cirujano, la operación, que se llevó a cabo ayer, ha sido un éxito y el paciente podrá ser dado de alta mañana y podrá hacer ya vida normal.
La operación realizada en la clínica Teknon ha conseguido que el joven conserve el bazo, un órgano esencial por su función inmunitaria y para el reciclaje de los hematíes de la sangre.
El cirujano, que fue el primero que practicó en España en 1992 una intervención por laparoscopia, ha precisado que practicó dos agujeros de 5 milímetros, uno de diez y otro de doce, para extirpar el tumor y un centímetro más de seguridad a su alrededor y dejar parte del bazo para que pudiera seguir cumpliendo sus funciones.
"Cuando los tumores tienen más de seis u ocho centímetros es mucho más difícil extirparlos y hacerlo con esta técnica, y a menudo se decide hacer la operación abriendo en canal y muchas veces supone la extracción total del bazo", ha señalado Ballesta.
Ballesta ha destacado que gracias a la laparoscopia el joven no ha necesitado ni transfusiones de sangre ni ingresarlo en la UCI, como sucede con una operación tradicional.
El cirujano también ha utilizado en su intervención bisturís de última generación para cortar con precisión la parte del bazo extirpada.
"Supone un avance importante", ha destacado Ballesta, que ha insistido en que es la primera operación con esta técnica que se practica en España y Europa, "y quizá también en el mundo", según el médico, para extraer un tumor tan grande y extirpar sólo una parte del bazo.
Ballesta, de 70 años, que durante años ejerció en el Hospital de Bellvitge, fue el primer cirujano que practicó una intervención de obesidad por laparoscopia en el Estado.
