Bilbao - Va a ser uno de los cruceros más espectaculares que haya atracado nunca en los muelles de Getxo. Será a primera hora del próximo viernes cuando el Celebrity Edge, la última perla de la naviera de lujo Celebrity Cruises, entre al puerto en su primera escala del viaje que le llevará durante diez días desde la localidad británica de Southampton hasta la capital italiana de Roma.

Un barco excepcional ya que incorpora las últimas tecnologías, ofrece espacios inéditos en una embarcación de este tipo y puede trasladar más de 2.900 pasajeros que son atendidos por 1.300 tripulantes en casi 1.500 camarotes que se distribuyen en un total de 14 cubiertas. Su coste ha sido de mil millones de dólares, alrededor de 857 millones de euros. Ahí es nada.

Lo que más llamará la atención de los curiosos que se acerquen a contemplar este coloso naval será la gran plataforma de nueve toneladas de peso que sobresale por su color naranja en el lado de estribor. Es la denominada alfombra mágica que puede subir y bajar como si fuera un ascensor pudiendo parar en las cubiertas y que, dependiendo de la hora del día o el clima, puede servir de bar o restaurante para especialidades a la altura de diferentes cubiertas. Pero hay más. Es el primer crucero que antes de su construcción en Francia ha sido completamente diseñado por ordenador en 3D, una labor en la que han intervenido ingenieros y arquitectos de relumbrón como Tom Wright, autor del emblemático Burj Al Arab Jumeirah, el hotel con forma de vela en Dubai.

Los camarotes también son únicos. Ademas de contar con el diseño de la afamada interiorista española, Patricia Urquiola, su concepto incorpora el espacio del balcón a la cabina a través de una ventana de suelo a techo, que se desliza para convertirse en pocos segundos en terraza. Este diseño, que permite contar con un 23% más de espacio en la habitación, se incluye en 916 de los 1.467 camarotes del barco y se ha bautizado como Infinity veranda.

Además de costar mil millones de dólares también es un barco para milenials debido a la increíble tecnología que aporta a los usuarios. En cada cabina, un panel de pantalla táctil permitirá manejar ventanas, temperatura o iluminación de las diferentes estancias de la cabina. Para acceder al crucero se utilizará reconocimiento facial y guías geoperimetradas, lo que impedirá las colas de entrada. Y además, una aplicación de conserje virtual en el móvil permitirá pedir bebidas o hacer reservas en el restaurante.

Es la “reinvención de unas vacaciones en el mar, elevando el concepto de lujo en un crucero”, aseguraron sus responsables en la presentación del buque a finales del pasado año y que, tras singlar durante el invierno en el Caribe, ahora pasará por Euskadi camino del Mediterráneo donde navegará todo este verano.