tudela - Un centenar de personas participaron en la marcha convocada ayer en Tudela por el colectivo Gladys Gogoan para conmemorar el 40º aniversario de la muerte de Gladys del Estal. En el acto, que arrancó en la plaza de los Fueros con la interpretación de varias piezas musicales por parte de un grupo de gaiteros y concluyó en el puente del Ebro (junto a la Papelera) colocando un ramo de flores en el lugar donde la joven ecologista cayó al suelo abatida por el disparo de un guardia civil, se exigió “reconocimiento por la injusticia cometida” el 3 de junio de 1979, fecha en la que Gladys perdió la vida en una concentración pacífica, así como “la reparación de su memoria”.

“Gladys es una víctima. Pero no una víctima de segunda categoría. Sus familiares y allegados tenemos el derecho a que las máximas autoridades del Estado reconozcan el daño causado”, aseguró Rafa Alday, amigo de Gladys del Estal y miembro de la plataforma Gladys Gogoan. En este sentido, añadió que “el olvido, el desinterés del Estado en reconocer y reparar sus errores nos mueve a mantener viva su memoria, empañada por falsos testimonios e injustos veredictos y la connivencia entre los poderes policial y judicial”.

Asimismo, manifestó que, si bien a Gladys no se le puede devolver a la vida, si es posible lograr los objetivos que llevaron a esta joven a acudir hace 40 años a Tudela y que le costaron su muerte. “Quienes apoyamos esta declaración solicitamos que aunemos las fuerzas y el sentido común para hacer realidad estas demandas”.

Alday, que intervino en el acto junto a Isa Fernandino, también amiga de Gladys y representante del colectivo Gladys Gogoan, recordó que aquellas reivindicaciones de 1979 siguen vigentes, pese al cierre de la central nuclear de Garoña. “Las aguas del Ebro no se libran del peligro radioactivo, se está construyendo allí una piscina que almacenará los residuos generados. La amenaza y la inseguridad de un accidente permanecen cerca”, aseguro, al tiempo que reivindicó el cierre del Polígono de Tiro de Bardenas. “Demandamos vida, paz y no más guerras”, concluyó. - J.A.M.