madrid - La Audiencia Provincial de Madrid condenó ayer a veinte años de prisión a la auxiliar de clínica del hospital de Alcalá de Henares (Madrid) que un jurado popular consideró culpable del asesinato en 2017 de una anciana a la que inyectó gas en las venas. Según la sentencia, por la elevada cantidad de gas detectada queda excluida “a todas luces” la hipótesis de que se tratara de un accidente y se ha probado también que Beatriz L.D. se aprovechó de la “situación de indefensión prácticamente absoluta” en que se encontraba la víctima dada su edad (86 años), su estado de salud y su discapacidad visual. Junto a los veinte años de prisión, por el daño moral causado deberá indemnizar con 40.000 euros a un hermano de la víctima y con 3.000 euros a otro hermano. - Efe