pamplona - Representantes de Podemos, PNV, ERC, JxCat y Bildu, así como familiares y amigos, se congregaron ayer ante el Tribunal Supremo para solidarizarse con los reclusos procesados por la agresión a dos guardias civiles y sus parejas en Alsasua en octubre de 2016 y exigir una sentencia justa. Desde Unidas Podemos, Enrique Santiago expresó el “hondo pesar” que le produjo una sentencia “desproporcionada” por unos hechos que nada tenían que ver con terrorismo, por lo que ha confiado en que el Supremo tenga suficiente “mesura y sensibilidad” para aplicar las leyes con “la debida proporcionalidad” y “corregir esta injusticia”. Santiago manifestó su deseo de que los ocho jóvenes salgan cuanto antes de la cárcel porque los tres años que ya llevan en ella son “suficientes” para “una pelea de bar”, para unos “hechos desafortunados” que “han sido juzgados y condenados de una forma muy desproporcionada”.
Marta Rosique, de ERC, también transmitió su “plena solidaridad” con los presos y denunció el “claro montaje policial y ataque mediático” que ha supuesto este caso. Y continuó: “Esto lo encontramos día a día, con artistas que son reprimidos por la Justicia, con políticos que defienden la democracia y son perseguidos por la Justicia o con estos jóvenes que son perseguidos por una simple pelea de bar”. Joseba Agirretxea, del PNV, también calificó de “injusta” esta causa e hizo suyas las palabras de la expresidenta navarra Uxue Barkos cuando dijo que “en base al código postal se deciden sentencias”. “Creemos que eso es precisamente lo que está ocurriendo en este caso”, resaltó, antes de pedir proporcionalidad y justicia. Miriam Nogueras, de JxCat, consideró injusto el encarcelamiento, “otro episodio” de la Justicia española. Por su parte, Oskar Matute, de Bildu, reclamó el fin de este “esperpento” y que “por una santa vez impere la cordura y estos chavales encuentren justicia”, que “solo puede pasar por su libertad”. - E.C.
