pamplona - Juan José Lizarbe, abogado y exdirigente del PSN, tiene un protagonismo crucial en la sentencia del TSJN: es el letrado que se encargó de redactar el recurso de la UGT contra el decreto del euskera. Y ayer, consultado por este periódico, asumía que se trata de una sentencia “muy importante”, tanto en el plano meramente jurídico como en el político.

Desde el punto de vista de la sentencia, Lizarbe asume que los magistrados del TSJN le dan la razón en algunos puntos y se la quita en otros, pero sustancialmente “se carga la mitad del decreto”, lo que supone “darle la vuelta como un calcetín a la política lingüística en Navarra con relación al euskera”. No sólo la del Gobierno de Barkos la legislatura pasada, sino la que se hacía “hace quince años con UPN”. “De alguna forma pone una especie de guía de por dónde hay que fomentar y no imponer el euskera”, resume, recalcando que se esforzó “durante un montón de páginas” en argumentar que “las administraciones públicas tienen que fomentar el uso del euskera”, pero no mediante decretos que “tratan de forzar sibilinamente el uso”. La sentencia es recurrible. Pero él, asegura, no lo haría. Considera, y ya salta a la interpretación política, que la sentencia puede ser un punto de partida para consensuar una posición conjunta sobre el euskera. “La sentencia viene a decir: pónganse de acuerdo en cómo se debe promocionar el euskera, que hay que promocionarlo”, y recomienda al Gobierno actual, al que confiesa apoyar, que trate de encontrar “un punto de encuentro para hacer lo que es sencillamente normal con el euskera”. “Ni corramos tanto, ni no hagamos nada”, resume. - A.I.R.