PAMPLONA. Cientos de personas, convocadas por el colectivo Sare, se han manifestado este sábado por las calles del centro de Pamplona para exigir el final de la política penitenciaria.

Desde la antigua estación de autobuses, los manifestantes, que portaban una pancarta con el lema "Presoak etxera" (Los presos, a casa), se han dirigido a la Plaza Príncipe de Viana, donde les aguardaba un grupo de familiares de presos con otra pancarta en la que podía leerse "Etxean nahi ditugu" (Los queremos en casa).

La manifestación ha vuelto a hacer un alto al llegar a la Plaza de Merindades, donde se ha simulado un accidente de tráfico con dos jóvenes tirados en el suelo, mientras otros portaban carteles con datos y fotografías sobre las personas fallecidas en las carreteras en los trayectos para visitar a los presos.

En este punto, Jone Galarza ha explicado a los medios de comunicación que Sare ha convocado esta marcha "para exigir el fin de la política penitenciaria, para denunciar la muerte de 16 familiares a consecuencia del alejamiento, para exigir la libertad de los presos gravemente enfermos, para reivindicar el derecho de los niños y niñas a crecer al lado de sus padres".

"Volvemos a salir a la calle", ha dicho, "para denunciar la situación de las mujeres presas, que, además de alejadas y aisladas, también se les castiga por el mero hecho de ser mujeres".

"Salimos a la calle para ofrecer nuestro cariño a familiares y amigos, en definitiva, para decir alto y claro que hay que dar solución a esto", ha declarado Galarza, quien ha subrayado que "es necesario para construir esta convivencia en paz y esa paz que traiga a casa a presos, exiliados y deportados".