PAMPLONA. El Pleno del Parlamento de Navarra ha rechazado hoy, con los votos en contra de PSN, Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e I-E y el voto a favor de Navarra Suma, la toma en consideración de la proposición de Ley Foral del Estatuto de las Mujeres Rurales de Navarra.

La proposición de Ley impulsada por Navarra Suma tenía por objeto «establecer concreciones en las obligaciones de las Administraciones Públicas a la hora de garantizar los derechos de las mujeres rurales, liberando a tal fin los recursos necesarios para hacer efectiva la igualdad de oportunidades y trato en el ámbito rural y en el sector agrario, sin obviar la brecha respecto al medio urbano».

Dado el «papel esencial de las mujeres en relación a la vertebración y la cohesión social del medio rural», se proponía la aprobación del Estatuto de las Mujeres Rurales de Navarra como instrumento de promoción y orientación de cuantas medidas contribuyan a reforzar su autonomía y su posición económica, profesional, social y política.

A tal efecto, se entiende por medio rural los municipios de menos de 3.000 habitantes y por mujeres rurales aquellas que sean o pretendan ser titulares de une explotación agraria o de cualquier otra actividad enclavada en el medio rural, donde se desea facilitar su permanencia.

En ese contexto, se enumeraban una serie de medidas a nivel fiscal, educativo, sanitario de formación y acompañamiento para reforzar la perspectiva de género en lo tocante a la creación y desarrollo de infraestructuras y servicios en el ámbito rural, también para las personas mayores y con discapacidad.

Se estipulaba que en el plazo de tres meses desde la entrada en vigor de esta Ley se realizará un análisis de la demanda existente en relación a transporte escolar infantil, apertura de casas amigas y disponibilidad de plazas públicas suficientes en centros de día, residencias de mayores, centros ocupacionales, transporte adaptado y asistido, así como servicios de autonomía personal y prevención de la dependencia, incluidos los de proximidad complementarios a la atención domiciliaria.

Dicho plan debía ir acompañado de un plan de actuación que, con plazos concretos y dotación presupuestaria suficiente, deberá ser presentado ante el Parlamento antes de que transcurran seis meses.

Del mismo modo, se daban otros seis meses para que el Gobierno de Navarra y la Federación Navarra de Municipios y Concejos suscriban un pacto interinstitucional para que, en el marco de sus competencias, procedan a la puesta en marcha de las medidas de promoción de la mujer rural recogidas en esta Ley.

Por último, se proyectaba la adhesión del Ejecutivo Foral al Foro Rural Mundial y a todas aquellas redes europeas que tengan como objetivo la promoción y garantía de los derechos de las mujeres rurales.

En su defensa, Isabel Olave, ha subrayado que "la mujer es el principal activo del medio rural", por lo que la proposición aboga por evitar la masculinización de este medio, su despoblamiento y la desigualdad entre géneros en este medio.

"Este estatuto pretende fijar derechos y medidas concretas para la mujer rural", que se dibujan en la Ley foral de Igualdad pero "con trazos gruesos, que no son suficientes", por lo que se plantean avales y créditos, formación, ayudas a contratación y otros incentivos para la mujer rural, para "impulsar su crecimiento en todos los ámbitos".

"No priven a Navarra de esta herramienta", ha pedido para considerar que "si están de acuerdo en el fondo, la forma no debería ser un problema, a no ser que el verdadero problema" sea que la propuesta procede de Navarra Suma, ha advertido.

En contra, Nuria Medina (PSN), tras criticar el "punto paternalista" de la intervención anterior, ha considerado que "no es ni el momento ni la forma" de abordar esta cuestión, que entiende implícita en la ya aprobada Ley foral de Igualdad, "pionera y trasversal, que contempla que en todas las políticas públicas debe de estar contemplada la perspectiva de género".

Por Geroa Bai, Jabi Arakama ha dicho "compartir el objetivo" descrito por la propuesta, pero ha advertido de que Navarra "ya cuenta con el marco normativo" para alcanzarlo e incluso "se defiende mucho mejor desde la actual Ley foral para la Igualdad entre Hombres y Mujeres", por lo que la proposición de NA+ "no solo no mejora sino empeora" la situación normativa actual.

También desde EH Bildu, Patricia Perales, pese a no estar en contra del contenido propuesto, ha advertido de su "escepticismo y desconfianza" por las "deficiencias muy significativas en esta ley, muy incompleta y muy parcial", que contiene "políticas de igualdad que no son feministas" y obvia "realidades sociales", por lo que obedece a la "política de postureo" de Navarra Suma, cuyos partidos integrantes votaron en contra de la Ley foral de Igualdad.

Ainhoa Aznarez (Podemos) ha dicho "no ver oportuno" su apoyo al existir ya una Ley, que deriva a un Plan estratégico en el que ha animado a "trabajar para que recoja todo lo que está proponiendo" y que contiene "esa perspectiva de mujer rural" y habla de su "empoderamiento".

La portavoz de I-E, Marisa de Simón, ha coincidido en mostrarse de acuerdo con la exposición de motivos de la propuesta, pero esta "es innecesaria, no aporta nada al desarrollo de la Ley de Igualdad y no vemos su utilidad", ha dicho tras achacar precisamente al modelo neoliberal de las políticas de NA+ el origen de esta desigualdad.