- “Estamos muy atentos porque los días acumulados de confinamiento pueden agravar los procesos de violencia de género y provocar que aumenten los episodios graves”. Alerta de ello Eduardo Sainz de Murieta, comisario principal del Área de Investigación Criminal de la Policía Foral, organización que desde la declaración del estado de alarma por el COVID-19 ha intensificado el seguimiento telefónico a un total de 359 mujeres a las que presta atención y protección por especial vulnerabilidad con el fin de poder “dar respuesta a las nuevas necesidades derivadas de la crisis sanitaria”.
Tanto desde la Brigada Asistencial como desde las comisarías territoriales, los policías especializados en atención a víctimas de violencia de género llevan días intensificado el contacto telefónico, al objeto de “transmitirles que no están solas, conocer cómo les está afectando la nueva situación generada y aclarar las posibles dudas que puedan tener sobre su situación particular”, comenta Sainz de Murieta. En la actualidad, la Policía Foral realiza el seguimiento a 359 mujeres víctimas de violencia, de las que tres se encuentran en situación de riesgo “alto”, 40 en situación de riesgo “medio”, 151 en riesgo “bajo” y 165 en riesgo “no apreciado”.
La mayoría de las mujeres en esta situación “no están conviviendo con sus agresores porque cuenta con órdenes de protección”, de modo que “no relatan episodios de violencia”, explica el comisario principal de Investigación Criminal, que sí resalta que “hemos tenido algún caso en el que se ha incumplido la prohibición de comunicación, los cuales han sido notificados al juzgado. Al margen de eso, hemos tenido un único caso en el que se produjo un acercamiento a la víctima, que nos llamó y procedimos a la detención del varón”.
Sainz de Murieta explica que las mujeres “están tranquilas y nos preguntan más dudas sobre el estado de alarma que sobre su propia situación. El estado de confinamiento general de la población favorece su protección, ya que el agresor tiene más difícil su movilidad y su propio confinamiento les da una mayor protección a ellas mismas”, subraya.
Sin embargo, desde la Policía Foral “no se descarta que el confinamiento decretado pueda genera situaciones críticas conforme vayan avanzando los días y se haga más complicado pedir ayuda. Estamos muy alerta porque no cabe duda en que la medida que vaya pasando el tiempo, los procesos de violencia van a experimentar una intensificación debido a la convivencia continuada”.
Por este motivo, reitera la necesidad de contactar con la Policía ante cualquier situación de violencia que se produzca con ocasión de la declaración del estado de alarma, solicitando también la colaboración ciudadana ante cualquier sospecha de violencia de género en el entorno para poder movilizar patrullas y confirmarlo.
Desde la declaración del estado de alarma la Policía Foral ha recogido e investigado un total de diez denuncias por delitos relacionados con la violencia de género, y se ha procedido a la detención de tres personas por distintos delitos de violencia hacia la mujer. “La frecuencia de casos de violencia de género en el estado de alarma es menor que en una situación sin confinamiento y los que se producen los estamos atendido con normalidad. No hemos encontrado ningún caso excesivamente grave”, señala Sainz de Murieta.
El mando de la Policía Foral advierte de que “en estos casos de violencia de género nuevos ha habido que trasladar a la víctima a una casa de acogida, porque no tenía una alternativa de alojamiento segura. Lo normal es que la denunciante se quede en su propio domicilio o se desplace a la vivienda de personas afines”, para volver a incidir en que “ahora mismo consideramos que la situación está contenida, pero no descartamos que en las próximas semanas si esto se alarga haya episodios más graves. La violencia de género es un proceso que empiece con pequeñas amenazas, gestos, insultos, con actitud de control y progresivamente va a más. Cuanta más convivencia haya, más riesgo hay de que haya episodios más graves”.
Sainz de Murieta hace hincapié en que a “las mujeres hay que trasladarles que estamos totalmente disponibles y que no duden en contactar con las Policías si lo necesitan, porque el hecho de que estén confinadas no implica que los recursos a su disposición no estén funcionado”.
“El estado de confinamiento general de la población favorece la protección de las víctimas”
Jefe de Investigación Criminal de PF