- La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, aseguró ayer en una entrevista a EuropaPress que no contempla la opción de aplazar las Evaluación de Acceso a la Universidad (EvAU) hasta septiembre en el caso de que la pandemia del coronavirus impidiera los exámenes presenciales en el calendario previsto, entre finales de junio y principios de junio. “Sería mucho esfuerzo para el alumnado, que está trabajando mucho y muy bien desde el pasado mes de septiembre en la preparación de las pruebas”, afirmó Celaá, quien admitió que no ha pensado en una alternativa en el caso de que las autoridades sanitarias desaconsejen la celebración de la Selectividad en las fechas previstas. “Trabajaremos en la alternativa simplemente por lo que pueda pasar, pero de momento queremos sostener con firmeza lo que es un acuerdo con las comunidades”, explicó

En concreto, el Gobierno y las comunidades autónomas acordaron, en marzo, celebrar las pruebas de la EvAU entre el 22 de junio y el 10 de julio y que la convocatoria extraordinaria se pueda realizar antes del 10 de septiembre. Antes de la pandemia, las pruebas estaban previstas para antes del 16 de junio en todas las comunidades autónomas. Celaá considera que es pronto para pensar en un plan alternativo a los exámenes presenciales de la EvAU. “Según se vaya acercando la fecha, y si vemos que no se abren las condiciones sanitarias suficientes, ese plan estará encima de la mesa”, aseveró la ministra, que sí descartó sustituir la prueba, que cada año realizan más de 200.000 estudiantes de Bachillerato, por una evaluación continua, como se ha decidido en Francia. “Me decanto porque el alumno tiene que ser capaz de superar su acceso a la universidad”, sostuvo.

La ministra de Educación y Formación Profesional mantiene la esperanza, siempre que lo permitan las autoridades sanitarias, de que los estudiantes de enseñanzas no universitarias puedan regresar a las aulas al menos unos días en junio, antes de que finalice el curso, aunque lo tengan que hacer con mascarilla. “Es evidente que las medidas higiénicas, tal y como las reitera el ministro de Sanidad, deben ser observadas y por tanto tendremos que pensar en fórmulas que permitan esas mediadas de distancia, mascarillas y lavado de manos”.

Por otra parte, la ministra se mostró dispuesta a incorporar a su reforma educativa, que está ya en trámite parlamentario, propuestas para “intensificar” la enseñanza digital y a distancia a la que se han visto abocados los docentes y estudiantes por la pandemia del coronavirus. “La escuela es insustituible, pero el proyecto impulsado por su Ministerio conlleva como principio rector la digitalización de la educación”, afirmó.