- Un rebrote de contagios con 187 casos nuevos en dos semanas y ocho ingresados en la UCI, entre asistentes a una fiesta de cumpleaños y trabajadores de mataderos, ha supuesto un frenazo en la desescalada en Lleida, que, de momento, se mantendrá en la fase 1 una semana más y no avanzará a la 2.

La Generalitat propuso ayer al Ministerio de Sanidad que las regiones sanitarias de Girona y Catalunya Central, así como las comarcas del Garraf y el Alt Penedés, progresen el próximo lunes a la fase dos, y que el área metropolitana de Barcelona, que está en fase 1, se reagrupe en una sola región para permitir la movilidad de sus ciudadanos en toda su superficie.

Pero la región sanitaria de Lleida, que llevará ya 15 días en fase 1, no ha sido propuesta para la fase 2 por culpa de este repunte de contagios, que, según Salud, son 187 casos, con 24 hospitalizados en planta y ocho en la UCI.

Aunque Salud eludió hablar de rebrote y prefiere denominarlo aumento de casos, admitió que estos contagios nuevos se han producido en residencias, personal sanitario, empresas agroalimentarias -mataderos- y en una fiesta de aniversario con 20 personas, en la que se contagiaron todas, celebrada en Lleida.

El día 11 de mayo la tasa de incidencia acumulada en 7 días en la provincia de Lleida era de 12,1 casos por 100.000 habitantes, mientras que el 22 de mayo era de 42,7 casos.

El Departamento de Salud esperará unos días a ver la evolución de los nuevos contagios para decidir cuándo propone un avance de fase para la región sanitaria leridana.

El director general de Profesionales de la Salud, Marc Ramentol, informó ayer de que visitarán las empresas agroalimentarias donde se han registrado los nuevos casos de coronavirus para comprobar si las bajas temperaturas en las que trabajan pueden haber influido.