La pandemia ha certificado la agonía que atraviesa la Atención Primaria en España y “se están rompiendo las costuras” de un sistema, donde los problemas de recursos humanos y económicos venían de atrás. En una entrevista con Efe, esta es la radiografía que hace de la situación actual José Polo García, nuevo presidente de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen) y médico de familia en el centro de Salud Casar de Cáceres.

Los médicos de primaria, relata, están sobresaturados, doblando guardias y consultas para cubrir a los compañeros que están de baja. Se suma además el creciente descontento de unos pacientes, mal informados, que la pagan con unos facultativos que en algunos casos son víctimas de agresiones. “Hay cansancio, estrés y cuadros de ansiedad” por una pandemia que también provocó muchas bajas entre su filas.

El problema de la Atención Primaria “es crónico, viene arrastrando la falta de inversión, la falta de voluntad política de potenciarla, y con unos presupuestos muy bajos”.

Para Polo, la planificación en recursos humanos “es deficiente y ofrece contratos basura a los profesionales”. Tampoco incentiva, añade, un desarrollo de la actividad profesional con unas carencias enormes de falta de acceso al diagnóstico y de resolución.

“Esto empuja a que muchos profesionales busquen trabajo en el extranjero, donde encuentran mejores contratos y mayor capacidad de desarrollar un trabajo clínico y no burocrático como hacemos en España, que ocupa un 30% de nuestro trabajo de consulta”, dice.

Considera también que la pandemia en Atención Primaria ha supuesto problemas: “estamos sobresaturados, porque atender al paciente vía telefónica o vía telemática acarrea problemas; hay patologías que se pueden resolver pero otras precisan de atención presencial”.

Además, explica que debido a que se ha informado poco a la gente de la situación que padecen, se han generado descontentos enormes.

A nivel administrativo, refiere, las llamadas telefónicas “no se están canalizando bien porque no se han potenciado estos servicios”.

Hay que tener en cuenta, dice, que son muchos meses de enfrentarse a la covid-19, de ver que muchos compañeros se han contagiado. Añadir que a este escenario “hay que sumar las suplencias que hemos hecho por las vacaciones de los compañeros”. “En mi caso por ejemplo yo llevaba además de mi consulta, otras dos más, pero esto ya sucedía antes de la pandemia”.

En relación al papel que puedan jugar los farmacéuticos como rastreadores o realizadores de pruebas PCR, Polo aclara que le parece bien, pero se pregunta que quién lo va a pagar, el paciente o la sanidad pública.

En cuanto a la contratación de médicos extracomunitarios y sin formación MIR para echar una mano con la pandemia, lo califica de “barbaridad, inequidad y falta de garantías”.

“La Atención Primaria tiene falta de inversión y falta de voluntad política de potenciarla”

Presidente de Semergen