La enseñanza en euskera mantiene su espacio a pesar de que las preinscripciones registradas en 3 años han disminuido un 6%, un porcentaje que coincide con el descenso de la natalidad que hubo en Navarra en 2018. Un total de 1.579 niños y niñas de 3 años estudiarán en euskera el próximo curso, según los datos provisionales recabados por la asociación de directores y directoras de centros de modelo D públicos (Nize) y la Federación Navarra de Ikastolas. El 76% se ha prematriculado en una de las 80 escuelas públicas que oferta el modelo D mientras que el resto ha optado por una de las quince ikastolas.

Los datos son provisionales y para extraer conclusiones definitivas habrá que esperar a conocer los datos totales que arroja el proceso de prematrícula en Infantil y Primaria, que por primera vez obliga a todos los centros públicos y concertados a reservar dos plazas por cada unidad (aula) para alumnado con necesidades de apoyo educativo. El listado provisional de admitidos se publicará en la web del Departamento de Educación el próximo 10 de junio y, tras las reclamaciones, se dará a conocer la lista definitiva el 18. Las familias deberán formalizar la matrícula entre el 21 al 25 de junio.

Ahora bien, a falta de conocer esos datos globales, todo apunta a que la distribución por redes y modelos lingüísticos no variará demasiado con respecto a los últimos años, en los que el modelo D aglutina en torno al 29% de las solicitudes totales. Y es que, aunque esta opción educativa presenta una ligera caída, es posible que el descenso en la natalidad registrado en 2018 (hubo 5.398 nacidos frente a los 5.746 del año anterior), provoque también un descenso generalizado.

En el caso de la enseñanza en euskera, la caída es más pronunciada en las ikastolas de la red concertada, donde se ha pasado de 422 matrículas registradas en 2020-21 a las 373 solicitudes obtenidas para el próximo curso. Los únicos centros que registran subidas son los de Lumbier (de 6 a 9), Tudela (de 5 a 15) y Tafalla (de 20 a 25) mientras que las caídas más llamativas se observan en las ikastolas de Estella (de 49 a 38), Etxarri (de 26 a 18), Jaso (de 40 a 30) y San Fermin (de 102 a 93). "Cuando vi que teníamos 49 solicitudes menos me preocupé pero observando la prematrícula por zonas y otros centros parece que en parte la natalidad tiene su explicación. Habrá que esperar a tener datos globales para valorar los nuestros", afirma Josu Reparaz, director de la Federación.

Menos caída en la pública

En el caso de la enseñanza pública, el descenso se sitúa en torno al 4%. En este caso, se observan incrementos muy notables en escuelas situadas en barrios de Iruñerria en plena expansión. Así las cosas, al albur de Erripagaña, Mendigoiti crece de 41 a 57 y Elorri se mantiene en 38, mientras que Hegoalde, sita en Arrosadia, sube de 35 a 44 mientras que la nueva escuela de modelo D de Mutilva pasa de 40 a 59, por el efecto del Soto de Lezkairu. Otras localidades, como Aoiz, Alsasua, Arbizu, Atarrabia, Barañáin, Elizondo, Tafalla, Caparroso u Olite, se mantienen o crecen ligeramente.

En la otra orilla se sitúan escuelas de barrios de Pamplona y comarca, más estancados, como el Casco Viejo y la escuela San Francisco (de 34 a 24), Rochapea y Patxi Larrainzar (de 46 a 39), Huarte (de 30 a 19), Ansoáin (de 46 a 34) u Orkoien (de 38 a 27). Otros centros de localidades importantes como Irurtzun y Lekunberri también sufren pérdidas de en torno a una decena de solicitudes.