n 2018, 768 personas perdieron la vida en el Mediterráneo al tratar de alcanzar las costas españolas. Partiendo con el deseo de encontrar un futuro mejor, nunca pudieron llegaron a su destino. En memoria de todas ellas, y con motivo del Día Mundial de las Personas Refugiadas que se celebrará el próximo 20 de junio, se inauguró ayer en Pamplona la exposición fotográfica Personas refugiadas: huir para vivir. Además de las fotografías que permanecerán expuestas junto al Monumento al Encierro hasta el próximo día 28, se descubrió también una patera rescatada en 2018 en el Estrecho de Gibraltar.

"Lo que queremos es que la sociedad navarra sea consciente de que las personas que piden asilo tienen una mochila, un pasado con unos conflictos de los que escapan, y un viaje por el cual llegan a nosotros. Y es algo que hay que tener en cuenta a la hora de integrar y convivir con ellas" declaró el consejero de Políticas Migratorias y Justicia, Eduardo Santos, el cual aseguró que "es algo que como institución estamos comprometidas y comprometidos a reforzar".

Las imágenes mostradas en la exposición son obra de cuatro fotoperiodistas navarros: Maite Hernández Mateo, Iván Benítez, Unai Beroiz y Daniel Burgui, y reflejan, tanto algunas de las motivaciones de las personas refugiadas, para emprender la huida desde sus países de origen, como los peligros a los que se enfrentan durante su ruta migratoria.

Así, se pueden ver imágenes de la guerra en Siria, retratos de personas perseguidas por su condición sexual, o las duras condiciones en las que embarcan para cruzar por el Mediterráneo desde Turquía y hasta Grecia. Un trabajo que Daniel Burgui agradeció que "esté en la calle, porque así entorpece nuestro paso y nos hace reflexionar sobre una realidad no tan lejana".

Entre las imágenes que retratan esa realidad también se encuentra una fotografía de David Beriain, periodista navarro asesinado este mismo año en Burkina Faso, mientras grababa un reportaje sobre las migraciones en el mar de Alborán, y al que se le ha dedicado el acontecimiento.

El consejero Eduardo Santos recordó que esas vidas no solamente se pierden por naufragios de embarcaciones como las señaladas, sino que también hay muertes que se producen en campos de refugiados o cuando estas personas caen "en manos de mafias despiadadas que las mantienen prácticamente esclavizadas".

En el acto también participó Hadel Arab, una refugiada de Palestina, quien agradeció profundamente la atención recibida tanto por parte de la asociación Cruz Roja como por parte del Gobierno de Navarra y subrayó la necesidad de rodearse de "gente buena que te ayude". Pidió así que se siga trabajando para que " toda la gente tenga la oportunidad de vivir en paz y tranquilidad" independientemente de su procedencia.

Las imágenes recogidas en la exposición serán llevadas en los próximos meses a diferentes localidades de la Comunidad Foral cuyos Ayuntamientos, en algunos casos, ya han mostrado su interés por acogerlas.