- El director del Banco de Sangre y Tejidos de Navarra, José Antonio García Erce, reconoce que han hecho "un gran esfuerzo, en colaboración con Adona, y estamos muy agradecidos a los donantes" porque "hemos aumentado muchísimo la donación por aféresis". De hecho, se ha cuadruplicado en 5 años, pasando de 614 en 2016 a 2.636 en 2020. Así, con las cuatro máquinas que hay en Pamplona y dos en Tudela "estamos obteniendo entre 12 y 14 donaciones al día, pero necesitamos más". Por ello, invitan a todo donante habitual con experiencia, buen acceso venoso y tiempo -el proceso dura una hora- para que pregunten en el servicio si pueden ser candidatos. "Nuestra idea es alcanzar las 16 aféresis diarias de lunes a jueves y 12 los viernes", indica.

En este sentido, explica que "en la donación convencional centrifugamos, filtramos y tratamos la sangre para separar diferentes componentes. Por un lado, obtenemos los glóbulos rojos, los hematíes, que los utilizamos mayoritariamente para el tratamiento de anemias o sangrado; el plasma, que lo estamos usando para tratar los pacientes que tienen algún fallo en el hígado, algún fallo de coagulación o algún tratamiento especial dentro del manejo de una hemorragia masiva; y las plaquetas, que las utilizamos para el tratamiento de pacientes con quimioterapia, trasplantes de médula o pacientes oncológicos y también en algunos procesos quirúrgicos que sangran mucho o de mucho consumo, como la cirugía cardíaca". El problema, prosigue, es que hay más necesidad de plaquetas y "con la donación convencional no es suficiente".

De este modo, para aquellos donantes "con experiencia, con buenas venas y que dispongan de una hora de tiempo" está la donación por aféresis, donde "una máquina -mediante un pinchazo- es capaz de ir sacando sangre poco a poco, la centrifuga a tiempo real, in situ, y devuelve los componentes que no precisamos. Así, sacamos mayor cantidad y un producto de altísima calidad, que nos ayuda a cubrir esas necesidades que tenemos ahora de plaquetas para pacientes sometidos a trasplantes de médula ósea, de enfermedades hematológicas, oncológicas y cirugía cardíaca".

Además, expone García Erce, hay ciertos fármacos, como son la albúmina, las inmunoglobulinas, factores de la hemofilia y otros fármacos más, que se obtienen "a partir del procesamiento del plasma, que es muy complejo y que nosotros ni ningún centro nacional tiene capacidad de hacerlo". No obstante, Osasunbidea tiene un convenio con la farmaindustria para que procesen el plasma que ellos envían para obtener esos productos.

¿Cuál es el problema? García Erce responde que "por esa mayor actividad de trasplantes, mayor actividad de oncológico, mayor supervivencia de nuestros pacientes y porque se ha visto que la inmunoglobulina tiene unas propiedades inmunoprotectoras muy importantes para algunas enfermedades inflamatorias, con la donación convencional no tenemos capacidad, ni ningún centro del país, de obtener suficiente plasma para ser autosuficientes de estos fármacos especiales. Esto es una necesidad que era perentoria, pero por la situación de la covid, por la caída mundial de donación y sobre todo en EEUU, que es de donde proviene la mayor parte del plasma con el cual se obtienen los fármacos que importamos, a nivel nacional hay desabastecimiento, sobre todo, de inmunoglobulina".

En Navarra, según apunta, "por la gestión de los servicios de Farmacia de momento no hemos tenido problemas pero estamos muy preocupados".

Por todo, considera que la estimación de llegar a 3.300-3.500 donaciones en 2022 "posiblemente se ha quedado corta y habrá que alcanzar las 4.000 en 2022-2023 para ser autosuficientes de alguno de los productos; no de todos, pero sí de la mayoría".

Por años

779

En el último año 779 personas han donado por aféresis en Navarra, de las cuales 663 eran hombres -el 85,11%- y 116 mujeres. Al respecto, el Banco de Sangre se marca como objetivo tener una base de más de 1.000 donantes de este tipo. La Comunidad Foral cuenta con 20.625 donantes de sangre activos -que han donado en los últimos 3 años-, de los que 11.983 -el 58,1%- eran varones y 8.669 mujeres.

Donantes de aféresis. Deben ser donantes habituales y fidelizados -que al menos hayan donado 5 veces-, tener buen acceso venoso y pesar más de 55 kilos. Hasta el 14 de julio se habían superado las 1.500 donaciones en Navarra.

173.000 euros de subvención. El director del Banco de Sangre destaca que, gracias a un proyecto europeo, el centro va a recibir una subvención de 173.000 € para obtener plasma covid y plasma para la industria. Una ayuda con la que han adquirido dos congeladores especiales para plasma y ampliado la contratación de enfermería, sobre todo en horario de tarde. En una donación suelen sacar 600 mililitros de plasma: "Está establecido que se podría donar hasta 33 veces al año y 25 litros, mientras que en una donación convencional sólo se puede 4 veces al año. Por no abusar, intentamos que vengan una vez al mes".