Los jardineros y jardineras municipales tienen una de cal y otra de arena. A ratos permanecen varias horas bajo el sol, con el equipamiento de seguridad que "da mucho calor, sobre todo las botas", mientras ciertas labores las pueden realizar a la sombra. Ana, jardinera del ayuntamiento de Pamplona, prefiere trabajar con temperaturas muy altas antes que con frío invernal. "Yo aguanto relativamente bien el calor, pero hay gente que lo pasa fatal", comentó. Al menos, "hoy ha habido suerte, estoy con el agua y es mucho más llevadero.
"Sabemos que tenemos que beber mucha agua y echarnos crema solar, pero también es cierto que debería haber un protocolo de seguridad laboral en la calle", comentó. Concretó que "estaría bien saber cuándo nos tenemos que retirar, y sobre todo, fijar los grados en los que se puede trabajar", porque "te pones a trabajar a las 8 de la mañana y ya estás sudando. A partir de las 12 te achicharras" aseguró. Considera que "se deberían adaptar los horarios, como en otros momentos se ha ido haciendo. Hemos entrado antes para salir antes", afirmó.
