Fue una noche de las de no pegar ojo con el ruido del agua en caída bruta y los barrancos de muchas localidades de la Zona Media y la Ribera de Navarra haciendo estragos en los cascos urbanos. Pese a la amenaza, el amanecer ayudó a respirar porque los daños no fueron tan graves como podían imaginarse. Una torrencial tromba de agua, que alcanzó los 125 litros por metro cuadrado en Miranda de Arga, según los pluviómetros de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), sacudió la madrugada del miércoles a varios puntos de la geografía foral, anegó bajeras en Tudela, Fontellas, Caparroso y Miranda de Arga, donde el cuartel de la Guardia Civil se vio seriamente afectado, y deslizó el agua a cataratas por los barrancos de las citadas localidades. A lo largo del día se fue recuperando la calma. El servicio de Bomberos de Navarra acudió a intervenir en una veintena de incidencias sin que se produjeran heridos ni daños de consideración. Algunas carreteras, como la N-121 (Pamplona-Tudela), entre el pk. 57 (rotonda de Caparroso) y el 72,5 (Los Abetos), seguía cortada por la tarde a causa de la inundación provocada por la crecida de un barranco. También se produjo un corrimiento de tierras y se formó una gran balsa de agua en el pk. 28,5 de la carretera NA-6100 (Carrascal-Marcilla, a la altura de Vergalijo) en la que quedó atascado un coche cuyos ocupantes han sido rescatados sin que sufrieran daño alguno. Además, un tren con una treintena de pasajeros que se dirigía de Logroño a Lodosa quedó detenido a unos 100 metros de la estación de Lodosa al resultar averiado al parecer a causa de las precipitaciones.

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Las tormentas, con la primera luz del día, se trasladaron posteriormente hacia el sur de la Comunidad, causando el vuelco de un coche, sin que sus ocupantes resultaran heridos, a las 6.57 horas en la A-68, y el de otro vehículo a las 7.47 en la NA-115 (Funes) cuyo conductor fue trasladado en ambulancia al Complejo Hospitalario de Navarra con heridas leves. El accidente fue atendido por los bomberos de Peralta, que remolcaron a otro automóvil que se salió de la vía en el mismo lugar sin consecuencias para el conductor. Las precipitaciones provocaron inundaciones en viviendas de Tudela (calle Carnicerías, a las 6.47 horas) y Fontellas (calle Virgen del Rosario, a las 6.40 horas). En ambos casos se debió al colapso de los colectores lo que produjo embalsamientos y la entrada de agua en las casas.

Las incidencias fueron atendidas principalmente por bomberos de los parques de Lodosa, Peralta, Tafalla y Tudela, que han protagonizado una veintena de salidas de las que más de la mitad corresponden a Tudela y en su mayoría consistieron en achiques, además intervinieron patrullas de la Policía Foral en la regulación del tráfico y personal de Conservación de Carreteras del Gobierno de Navarra.

Por último, agentes de la agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Navarra atendieron por la tarde la salida de vía de un turismo en la carretera N-121, en Caparroso. El conductor del vehículo fue atendido por una ambulancia de emergencia sanitaria que lo trasladó al Centro Hospitalario de Navarra (CHN) con carácter leve.

“Han caído 80 litros, ha cedido un muro y se han levantado calles, pero podía haber sido peor”

Alcalde de Artajona

“Hemos limpiado este año el Barranco Salado y gracias a eso no ha habido más daños”

Alcalde de Caparroso

“Teníamos agua hasta la rodilla en alguna bajera y almacén, todo vino del barranco”

Alcalde de Miranda de Arga