Los globos de agua parecen proyectiles inofensivos, pero a veces no lo son tanto. Que se lo pregunten al propietario de un automóvil estacionado en una calle de Tudela, que vio cómo el lanzamiento de un globo desde un segundo piso fracturó la luna delantera de su coche. La Policía Local de Tudela ha tenido conocimiento del suceso y se ha encargado de tramitar el caso.