La salvación de Osés Construcción en Liga Femenina cada vez se complica más. Otra derrota en casa, contra Ferrol esta vez, y otra vez, y ya se encadenan unas cuantas, sin opción real de ganar el partido desde muy pronto. Aún no es matemático, pero Osés no recupera ni sensaciones ni resultados y así cada vez es más complicado. 

Osés Construcción necesitaba ganar como fuese a Ferrol. La presión comienza a notarse en el juego navarro de manera excesiva y el comienzo del encuentro fue fiel reflejo de ello. Las de Juantxo Ferreira se vieron superadas por un equipo que llegaba con 'resaca' tras lograr un hito en Europa. Hasta que el marcador no rondaba los diez puntos de distancia, las de Zizur no consiguieron encontrarse en el partido. Y cuando lo hicieron, de la mano de Lahtinen y de Bojicevic, una alero que da la impresión que de haber llegado en verano habría sido muy importante para no estar en esta situación, se acercaron hasta llegar a empatar el partido. 

En el segundo cuarto, otra vez los errores no forzados (fallos debajo de canasta o pérdidas sin mucho sentido) comenzaron a volver a dejar a Osés por detrás en el marcador. La distancia se volvió a marchar a la decena de puntos y esta vez no hubo reacción. De hecho, la última jugada del partido fue fiel reflejo. Osés podía agotar la posesión, pero forzó un tiro precipitado, dio el balón a las rivales, hicieron falta otorgando dos tiros al rival...que los falló, pero cogieron el rebote en ataque y anotó sobre la bocina (32-44). 

Al inicio del tercer cuarto, Ferreira dio entrada a Tunstull, inédita hasta el momento. La pívot salió arrolladora y en apenas minuto y medio las navarras se habían puesto a cuatro puntos y balón. Pero fallaron y todo lo logrado se fue yendo al garete ataque tras ataque. Ferrol subió la intensidad y los colegiados permitieron mucho contacto, algo que penalizó a las locales. 

Y ahí el equipo navarro se volvió loco. Con unas rotaciones muy diferentes a las habituales (hasta cinco jugadoras ocuparon el puesto de base), las locales no encontraron soluciones y la ventaja fue creciendo hasta rondar los 20. 

El resto del partido fue un quiero y no puedo en el que las navarras lucharon y probaron de todo (zonas, ataques más o menos rápidos) pero en el que el todo es una lucha sin cuartel sin resultados y eso agota a cualquiera. Y lo peor es que se ven algunos gestos y actitudes que no invitan al optimismo.

Al final, derrota de un Osés (68-83) al que las opciones de salvación cada vez se le complican más.