Una nueva Plata

La plantilla del Lagunak, con los técnicos David Carvajal y Carlos Bermejo en el centro. Fotos: Unai Beroiz / Iñaki Porto / Iban Aginaga / Oskar Montero

Lagunak, Loyola, Helvetia Anaitasuna y Gurpea Beti Onak volverán a ser esta temporada los protagonistas navarros de una División de Honor Plata que comienza este fin de semana y que lo hace con un nuevo decorado. Esta vez no se pondrá en marcha la que hasta ahora era la segunda categoría del balonmano femenino, sino que a partir de esta temporada se convierte en la tercera competición tras la reestructuración llevada a cabo. Por encima queda ahora la nueva División de Honor Oro, antesala de la máxima categoría.

Novedades al margen, lo que se mantiene intacta en cada uno de los cuatro participantes navarros es la ilusión con la que saltarán a la cancha a partir de este fin de semana. Para empezar, un plato fuerte. El derbi entre un Loyola que, pese a descender, jugará en la categoría, y el Lagunak de Barañáin. Será el domingo a las 12.00 h en el polideportivo del colegio San Ignacio. Un día antes, el Helvetia Anaitasuna debutará con visita a la cancha del Aiala Zarautz (17.30 h) y el Gurpea Beti Onak –que ha visto cómo su primer equipo ascendía a la elite– recibirá en Villava-Atarrabia al Kukullaga Etxebarri (20.00 horas).

De inicio, derbi

Como si el guion se repitiese, Loyola y Lagunak volverán a verse las caras en este arranque de la competición. Esta vez el escenario es Pamplona, en casa de un Loyola que competirá en la categoría pese al descenso de la campaña pasada. La ampliación de las plazas para el nuevo curso, una vez consumada la reestructuración del balonmano femenino, así le ha beneficiado.

A los mandos estará Daniel Areste, alma mater del club y que asume de nuevo el banquillo tras los dos años de Alberto Echeverría. Contento por el reto, “con ganas de hacer una buena temporada” y sabedor de que coge un grupo “muy joven”. “Somos un equipo de colegio compitiendo en una categoría en la que cada vez se trae más gente de fuera. Nuestro trabajo está en la base, en que salgan jugadoras del colegio o también del ámbito navarro”, asegura Areste, consciente de que el primer objetivo es salvarse.

Esa misma meta tiene su rival del domingo, un Lagunak que volverá a comandar David Carvajal. Un equipo, el de Barañáin, que ha sufrido una reconversión total y que sólo mantiene dos jugadoras del curso pasado –Miren Chávarri y Uxue Alcalde–. “Hay que empezar de cero prácticamente. Para mí es un reto como entrenador. Puede ser una temporada ilusionante en cuanto a trabajo y construcción de equipo, pero veremos también cómo va la temporada”, afirma el técnico canario.

Helvetia Anaitasuna.

Una vez superados los nervios iniciales del debut en la categoría, al Helvetia Anaitasuna le espera una segunda campaña en la Plata con un equipo que presenta nueve altas y cuya intención es “estar lo más arriba posible”. Las pamplonesas se miden al Aiala Zarautz el sábado, probablemente “la pista más difícil” de la categoría, pero Chema Vives ve capacitado al equipo “para dar la sorpresa”. “Vamos contentas con el trabajo realizado en la pretemporada. Nosotras saldremos a ganar todos los partidos. No voy a decir que vamos confiadas, pero sí con mucha ilusión por toda la labor que hemos completado”, dice.

BM Loyola

Quien tendrá la suerte de debutar en casa será el nuevo Gurpea Beti Onak Azparren Gestión de Plata, que recibe el sábado al Kukullaga Etxebarri. Tras el salto a la elite de sus hermanas mayores, las de Villava afrontan el curso en la Plata con un equipo muy joven, al que acompañan jugadoras como Jennifer Rivero o Jaione Etxeberria, que contribuyeron al ascenso y aportan la experiencia. Imanol Sanz, segundo de Miguel Etxeberria, estará al mando: “No hay expectativas, vamos a ver dónde nos pone la competición. El primer objetivo es la permanencia, pero también formar jugadoras que en un futuro puedan dar el salto al primer equipo”.