HELVETIA ANAITASUNA 33

BM LOGROÑO 36


Helvetia Anaitasuna (18+15) Juan Bar (portero), Bazán, Martinovic, Edu Fernández (7), Xavi González (3p), Marco Moreno (1) y Bonanno (1) –siete inicial–. También jugaron Iñaki Martínez (portero), Gastón (2), Ganuza (3), Ernesto Goñi (4), Aitor García (4) Redondo (4, 3p), Aitor Albizu (1) y Elustondo (3).

BM Logroño La Rioja (20+16) Palasics (portero), Abdoula Modi (3), Ponciano (7), Zaja (1), Xavi Tua (7), David Cadarso (7, 5p) y Edu Cadarso (5) –siete inicial–. También jugaron Mohamed Aly (portero), Martí Soler, Korchi (1), Edu Ortiz, Palomino (1) y Preciado (4).

Marcador cada cinco minutos 2-2, 4-5, 8-9, 11-13, 15-17, 18-20 (descanso); 21-22, 25-25, 27-28, 27-32, 30-33 y 33-36 (final).

Árbitros Ernesto Ruiz Vergara y Alberto Macías de Paz (Andalucía). Excluyeron dos minutos, por los locales, a Julen Elustondo y en tres ocasiones a Antonio Bazán, por lo que fue descalificado en el m.50. Por los visitantes, a Edu Cadarso y Zaja.

Pabellón Anaitasuna Unos 800 espectadores. Los jugadores de ambos equipos y la pareja arbitral posaron, antes del partido, con una pancarta contra la violencia machista. Asimismo, Álvaro Gastón recibió un reconocimiento por parte del club, por sus 300 partidos en la Asobal.

El BM Logroño La Rioja no ganaba al Helvetia Anaitasuna en La Catedral desde mayo de 2021 y este sábado se rompió esta estadística para desgracia de la escuadra navarra. Al equipo de Quique Domínguez le faltó mordiente defensiva, pecó de demasiados fallos en su zaga que acabó pagando caro ante un conjunto franjivino serio, que venía de perder el martes ante la Vojvodina en competición europea y que acabó por llevarse los dos puntos y adelantando a su rival en la clasificación. Derrota por 33-36, segunda consecutiva, y ahora a pensar en la visita a Puente Genil del viernes.

Con un siete inicial en el que Quique Domínguez tiró de nuevo del central Niko Martinovic en el extremo, Anaitasuna salió con la idea de retornar a la senda positiva tras la amarga derrota de Valladolid. Pero el equipo de Miguel Ángel Velasco tenía idénticas intenciones y con Edu Cadarso dirigiendo la ofensiva riojana, a los navarros les costaba estar cómodos en su retaguardia. Tras la igualdad inicial, y después de una concatenación de errores, Xavi Tua abría la primera gran diferencia para los suyos mediada la primera mitad (8-11, m.16). A la fiesta se unía Kristof Laszlo Palasics en la portería , que abortaba muchos intentos de acercamiento local. Bien lo saben Ganuza, que no tuvo la efectividad del duelo anterior –algo francamente complicado– o Mikel Redondo desde el extremo.

Aunque algún robo esporádico en defensa le daba al Helvetia una buena rentabilidad a la contra, lo cierto es que atrás seguía costando carburar. Xavi Tua, a falta de tres minutos para el descanso, ampliaba la renta a cuatro dianas (16-20), si bien Edu Fernández y Ganuza, junto al buen hacer en la portería de Iñaki Martínez –que había suplido a Juan Bar–, redujeron la diferencia a dos al descanso.

Tras el paso por los vestuarios, el partido se ponía de cara. Xavi González y Redondo, desde los 7 metros, superaban a Mohamed Aly bajo los palos, que había salido por Palasics, y empataban. Quien no pudo convertir desde el mismo punto fue Álvaro Gastón, que picó demasiado el balón y acabó estrellándolo en el travesaño.

Hubo que esperar hasta el m.38 para ver por delante de nuevo en el marcador al Helvetia. Aitor García convertía cada asistencia en gol y una diana suya colocaba el 24-23 en el electrónico. El panorama no pintaba nada mal.

Pero, para entonces, Antonio Bazán –uno de los baluartes defensivos del Helvetia y que este sábado, junto con sus compañeros, tuvo mucho trabajo con el pivote Abdoula Modi (2,11 metros)–, ya había recibido su primera exclusión. Poco después vio la segunda, a la que se le unió acto seguido la de Julen Elustondo. El BM Logroño, que dio entrada en la segunda mitad a Álvaro Preciado y eso le dio vida en el ataque, comenzó a aprovechar esos minutos de inferioridad. David Cadarso puso un 27-30 en el m.45 que obligó a Quique Domínguez a pedir tiempo muerto. Pero empezaron los fallos, los tiros al palo, y esta vez fue Edu Cadarso quien ahondaba en la herida con el 27-32 (m.48), la máxima renta del partido hasta entonces.

Con Bar de nuevo en escena, el Helvetia se topó con dos contratiempos. Uno, la descalificación de Antonio Bazán tras ver su tercera exclusión; y dos, la lesión poco después de Aitor García, que se retiraba en el m.51 afectado en el isquio o en el abductor, a falta de pruebas.

Sin pivotes natos, y tras siete minutos sin marcar, Ernesto Goñi acortaba distancias, pero el BM Logroño entraba en la recta final con una jugosa ventaja. Bar paró y la desventaja fue de tres goles. Pero la victoria, riojana.

QUIQUE DOMÍNGUEZ: "NOS HA COSTADO MUCHO ATRÁS"


Quique Domínguez echó en falta una mayor mordiente en la zaga, capaz de frenar el ataque riojano. “Nos ha costado, sobre todo en defensa. Logroño ha conseguido muchos goles y ha dispuesto de muchas ocasiones claras. No hemos sido capaces de encontrar nuestro nivel defensivo ni ajustar”, destacaba. El entrenador del Helvetia añadía: “No lográbamos poner el ritmo. Es verdad que nuestro contraataque funcionaba, pero atrás seguía costándonos”. Asimismo, el equipo cometió “dos o tres errores en ataque en la primera y en la segunda parte” que en el primer acto fue “capaz de igualar”, no así más tarde. A todo ello se le unió la descalificación de Bazán y la lesión de Aitor García. “Se ha ido juntando todo. Esas lesiones y exclusiones y esas decisiones arbitrales cuestionables”, que contribuyeron al resultado.

Patxi Cascante