El Elche vence con claridad al Replasa Beti Onak

Muchos palos en el inicio de partido con el Elche poniendo ventaja de 2-0 hasta que Lucia Zamora acortó distancias, pero Bernabé hizo su segundo tanto con una réplica inmediata. Pereira en una jugada individual de rabia y coraje entró hasta dentro del área superando rivales para hacer el segundo para las navarras. La brasileña se las jugaba casi todas ante la rocosa defensa ilicitana. Y cuando marcaba el Replasa, respondía el Elche sin dar tregua en lo que estaba siendo un partido roto donde las defensas apenas tenían tiempo para posicionarse. Otro palo del Elche con intervención de Luzuriaga impidió que el Elche aumentara su ventaja, pero quien no falló fue Paola Bernabé con su tercer gol, un obús.

Beti Onak atacaba con mucha movilidad para desordenar la defensa local pero le penalizaban las pérdidas y el Elche salía en desbandada. El Replasa ajustaba su defensa pero no podía evitar que las individualidades del Elche pusieran un 10-5 que obligó a Etxeberria a detener el partido. La sensación de correcalles comenzaba a ser preocupante. Zaira Benitez ponía lustre a la pizarra de Rocamora entrando sola por el centro.

No estaba cómodo el Beti Onak y un gol de Zamora permitía una tregua, pero un nuevo gol de Elche aplacaba la reacción navarra de inmediato. Oppedal marcaba justo después de que dos paradones de Morales frustraran a un Replasa al que no le salía nada con un 15-6 que empezaba a pesar. Miguel Etxeberría se veía abocado a pedir su segundo tiempo muerto y a pedir explicaciones. También es verdad que la efectividad del Elche cualquier expectativa. Etxeberría hizo ingresar a Encinas como parapeto a la sangría defensiva. Se iba dos minutos excluida Isabel Fernández y fallaba el siete metros Elche, afortunadamente. Hacian la guerra por su cuenta las jugadoras del Replasa Beti-Onak, con problemas para jugar como equipo. Y las acciones individuales quedaban como imagen de impotencia. Un golazo de Ripa y un parcial de 0-3 obligaba ahora al técnico local a hablar con las suyas. Una de las claves en la mejoría navarra fue Encinas, un muro infranqueable desde su comparecencia. Se atascó el Elche hasta que un lanzamiento de Kelly Rosa rompió la imbatibilidad de la portera del Beti-Onak aunque el Replasa evitó daños mayores pese a que la desventaja de siete goles era un importante lastre.

En la segunda parte, inauguraba el marcador Almudena para un Beti Onak obligado a mejorar sus prestaciones. Además, se iba excluida dos minutos Paola Bernabe y una vaselina de Zamora se iba fuera en la jugada de superioridad. Respondía el Elche con Ignjatovic, que se estrenaba en el partido. Parecía mejorar el Beti, pero Elche seguía inflexible en sus ataques y el 18-11 seguía siendo muy lejano. El Elche jugaba como si Bernabe hubiera estado en la pista e Ignjatovic, sacaba a pasear otra vez su cañón. Almudena se batía el cobre con la defensa local pero Replasa no era capaz de meter buenos balones en seis metros. El efecto Encinas había desaparecido y el Beti naufragaba de nuevo aunque había frenado la exuberancia ofensiva de las ilicitanas. Una Ignjatovic hiperactiva provocaba un siete metros y transformaba Vanessa para poner un preocupante más diez.

Las verdinegras se estrellaban las más de las veces contra el Elche sin que hubiera estrategia para revertirlo. Oppedal seguía a lo suyo, dando un recital. Y aunque marcó Prelchi, el Elche castigaba de nuevo y Rocamora consumía otro tiempo para optimizar sus explicaciones en un minuto porque su equipo estaba muy lejos de su mejor versión. El 24-14 a diez del final dejaba pocas dudas de que equipo ganaría el partido. Quedaba pues la dignidad de maquillar la derrota. Pero sin fluidez ni convicción resultaba harto difícil. Otra vez superioridad para las navarras por la exclusión de Kelly Rosa dio la oportunidad de cierto protagonismo con una gran Nerea Canas. El primer gol de Isabel Fernández rebajó a 24-17 la diferencia y Rocamora paró el partido con nueve minutos por delante porque su ventaja se había reducido. Pero Oppedal no estaba para armisticios y marcaba con la suficiencia de quien se siente superior. Y menos mal que Encinas volvía a engrasar sus guantes, porque de lo contrario las diferencias habrían sido mayores. También la emulaba Morales y de ahí que la producción goleadora de Beti Onak no fuera más cuantiosa. También porque Grasielly no tenía su mejor tarde. Tres goles de Lucia Zamora desde el extremo daban vida al Beti Onak en una reacción que resultaba tardía y un gol de Arruabarrena rebajaba a seis goles la diferencia. Rocamora pedía el último tiempo en un final en el que las ilicitanas bajaron su intensidad pero no su oficio.