El Replasa Beti Onak deberá sufrir hasta el finalGrafometal La Rioja
GRAFOMETAL LA RIOJA 17
REPLASA BETI ONAK 16
Grafometal La Rioja (9+8) Maitane Larráyoz (p), Tatiana Lozano, Lorena Pérez (1), Alba Sánchez (2), Lydia Blanco (1) y Marina González (3) –siete inicial–. Rodrigues (p), Blanca Benítez (3), Lewandowski (2), Correia (2), Paula Morales (1), Sara Moles (2), Novocic, Sidibe, Ederra y Loscos.
Replasa Beti Onak (7+9) Olaia Luzuriaga (p), Eider Hernández (1), Brasil Pereira (3), Isi Fernández-Agustí (2), Macarena Sans (1), Almudena Gutiérrez (1) y Nerea Canas (5) –siete inicial–. Patri Encinas (p), Adriana Mallo, Kelly Fonkeng, Ayelén García (1), Luzia Zamora (2), Libe Arruabarrena, Laida Urbitarte, Estitxu Rodríguez y Valeska Lovera.
Marcador cada cinco minutos 0-1, 1-1, 4-3, 6-4, 8-7, 9-7 (descanso); 11-11, 11-12, 12-13, 14-14, 15-15, 17-16 (final).
Árbitras Beatriz del Valle Encuentra y Patricia del Valle Encuentra (Andalucía). Excluyeron a Lewandowski, Alba Sánchez, Mina Novocic y Lydia Blanco por las locales; y a Almudena Gutiérrez por las visitantes.
Pabellón Palacio de los Deportes de La Rioja.
El Replasa Beti Onak no pudo sumar este sábado el necesitado triunfo en su visita a Logroño, donde acabó cayendo por la mínima ante el Grafometal La Rioja (17-16), y deberá esperar a la última jornada en casa ante el líder Mecalia Atl. Guardés para dilucidar si se salva o si jugará el play down –la lucha por la permanencia–, del que sigue fuera pese a la derrota, aunque a un punto.
Las de Miguel Etxeberria sabían que no iba a ser fácil ante las riojanas. El gol inicial de Brasil Pereira les dio algo de esperanza. Pudieron incluso colocar el 0-2 las navarras en otra acción de la brasileña, pero esta acabó fallando el lanzamiento. A partir de ahí, lo intentaron todo las visitantes, pero lo cierto es que la defensa riojana había corregido un par de desajustes iniciales y conseguía ahora abortar los ataques de un rival nervioso y sin demasiadas ideas. A las de Luismi Ascorbe les costaba anotar y tardaron hasta seis minutos y medio en inaugurar su marcador.
Las defensas y las pérdidas de balón de uno y otro equipo marcaban el ritmo y los goles llegaban con cuentagotas. Lo intentaban las riojanas dando un paso al frente, y conseguían ponerse por delante en el electrónico, aunque su ventaja no llegó en ningún momento a alcanzar los dos goles ante un Replasa Beti Onak que apretaba los dientes y ejercía una fuerte presión. Sin embargo, un fallo en el ataque de las navarras permitía a las locales poner el 6-4 en el minuto 18, obligando a Miguel Etxeberria a parar el partido.
Almudena Gutiérrez, atenta al partido.
Apareció Nerea Canas para sacar a las suyas del atasco, aunque fue sólo un espejismo, y tras colocar el 8-7, las de Villava volvían a perder de vista la portería local pese a que les quedaban más de seis minutos por delante y disfrutaron incluso de una superioridad numérica. Pero no volvieron a marcar y al descanso se llegaba de nuevo con dos goles de renta para Grafometal La Rioja (9-7).
Suspense hasta el final
Metieron una marcha más las navarras en el inicio de la segunda mitad, colocando el 11-11 en el marcador y provocando la exclusión de Novocic. Esta vez sí aprovecharon su superioridad y Almudena Gutiérrez puso el 11-12 cuando se cumplía el minuto 36. Ni siquiera su posterior exclusión sacó del partido a las de Miguel Etxeberria, que se ponían con +2 a falta de 20 minutos para el final (11-13).
Los cambios dieron alas a las locales, que seguían creyendo en sus opciones y volvieron a meterse de lleno en el partido gracias al buen hacer de su portera para poner el 14-14 a poco más de 10 minutos para la conclusión.
La igualdad era máxima. Los nervios estaban a flor de piel y los fallos se sucedían en una y otra área. Nerea Canas adelantaba de nuevo a las navarras, pero la alegría duró poco. Las locales igualaban y, con una defensa que rozaba la legalidad, conseguían volver a colocarse por delante a falta de poco más de cuatro minutos para el final del partido (16-15). Paraba el partido Etxeberria, había que arriesgar, pero las suyas fallaban el ataque y, en una contra rápida, Grafometal La Rioja ponía el 17-15. Había tiempo, restaban tres minutos de partido y Macarena Sans aparecía para devolver la esperanza a las suyas (17-16, m.27). Parecía que podía llegar el gol del empate, máxime cuando las locales se quedaban con una menos por la exclusión de Alba Sánchez, pero lo cierto es que La Rioja defendió ese gol de ventaja con uñas y dientes y el marcador ya no se movió, dejando sin premio a las navarras.