- ¿Cómo está viviendo esta semana, en la que el club cumple 100 años?

-Muy animado e ilusionado. y dispuesto a celebrar el centenario, por supuesto.

¿Va creciendo la ilusión conforme se va acercando la fecha?

-Bueno, yo creo que ya estaba ilusionado por celebrar el centenario en Primera. Eso es lo que realmente ilusiona y lo que creo que es realmente importante.

Si hay algo que resta es que la afición no va a poder participar.

-Sí, es la parte que resta. Y no un poco, mucho, muchísimo. Osasuna es un club de sus socios y todos deben de participar en este centenario. Hubiera sido maravilloso estrenar el estadio el día del centenario, aunque todavía no está terminado del todo, por la cubierta. Estar ahí todos sería maravilloso. Es la pena que tenemos.

¿Queda la fecha del día 24 algo empañada por esta circunstancia?

-No es que quede empañada, empañada no puede quedar una fecha tan importante como celebrar 100 años de la fundación de Osasuna. Otra cosa es que hubiera sido más vistoso celebrarlo de otra manera y que indudablemente esperamos y deseamos todos que esta pandemia pase para que podamos celebrar todos juntos la fiesta del centenario.

¿Podrá estar en el partido ante el Athletic?

-Sí, yo estoy francamente bien. Hicimos los test pertinentes, salieron negativos y por lo tanto yo me siento bien y animado. Con el cambio de hora yo creo que es mejor para que lo pueda ver más gente.

En cuanto al resto de directivos, ¿qué tal está Txuma Iso?

-Está bien, sigue ingresado en el hospital y hoy ya le ha bajado la fiebre. El está animado, pero un poco triste por no poder acudir a los actos del centenario, como otros muchos, desgraciadamente.

¿Cómo se imagina que va a ser el día del centenario, con el himno, el partido..?

-Yo me lo había imaginado de otra manera, con todos vestidos de rojo... Me lo imagino más como un acto simbólico en el estadio sumado a varios actos, como la iluminación en rojo por toda Navarra. Va a ser un día que tendremos en el recuerdo, sin perjuicio de que a lo largo de todo este año, mientras tengamos 100 años podamos celebrar muchos otros actos que realmente nos llenen, pero con todos los aficionados.

En lo personal, ¿qué supone ser el presidente del centenario?

-No sé, cuando me presenté hace seis años dije que me haría ilusión que Osasuna celebrase el centenario en Primera y tener la suerte de ser yo el presidente. Después de muchos malos tragos se ha conseguido, pero para mí lo importante es eso, que Osasuna celebre el centenario en Primera, porque tiene mucha más repercusión.

Cuando cogió el club había muchos problemas, deportivos y extradeportivos. ¿Cómo valora estos años, con dos ascensos o una reforma del estadio y con el equipo celebrando el centenario en Primera?

-Estoy muy contento con todas estas cosas que se han hecho. Hemos logrado que Osasuna esté en la mente de todos los navarros y de hecho así se ha demostrado. Con todas las dificultades de ahora, que no se puede ir al fútbol, me parece que es muy importante la respuesta de los aficionados.

En esta situación se ha alcanzado el récord de socios de Osasuna.

-Eso quiere decir una cosa: que tenemos vida para por lo menos otros 100 años más.

¿Cuáles son sus primeros recuerdos como osasunista?

-Mis primeros recuerdos siempre han sido a través de la prensa. Yo vivía en Sangüesa y no tuve la suerte de poder ver a Osasuna en el campo de San Juan, por ejemplo. Sí que me acuerdo perfectamente de leer en la prensa los martes sobre los partidos. Siempre he sido aficionado y lo he seguido, hasta que vine a Pamplona por trabajo y ya me hice socio.

¿Cuáles son los mejores recuerdos que tiene de Osasuna?

-Hay muchos. Me llevé una alegría inmensa cuando Osasuna subió a Primera contra el Huelva con los goles de Pablo Orbaiz y Trzeciak. Me acuerdo perfectamente de ese día y esa noche en la Plaza del Castillo. Eso me marcó. Entonces yo era defensor del socio y estaba más involucrado. También recuerdo con mucho cariño el ascenso en La Condomina, en Murcia, aunque no pude ir.

¿Y los peores?

-Bueno, ha habido muchos muy malos también, pero yo no me quiero acordar de los malos momentos. Hay que ser optimista. Los malos momentos hay que recordarlos sólo para que no vuelvan a suceder. Las estancias en los juzgados, las denuncias o el jugarnos el descenso a Segunda B en Sabadell obviamente son muy malos momentos, pero lo mejor es mirar hacia adelante con optimismo. Hemos hecho un campo nuevo y se ha llenado, me parece que hay que ser optimistas y disfrutar del futuro.

Hablando de ese futuro, ¿se ve presentándose a las elecciones, si pudiera darse el caso?

-No es un asunto que me preocupe lo más mínimo, lo primero porque no depende de mí. Depende de una reforma de los estatutos. Es cierto que mucha gente me dice que siga, pero primero tienen que querer los socios compromisarios. Todavía faltaría un año en cualquier caso, ya veremos lo que ocurre. Sí es cierto que hemos hecho muchas cosas, y me gustaría, si tuviera otro mandato, pagar la deuda y dejar el club lo más limpio de deudas posible.

¿Dejar el club libre de deudas sería el broche?

-Opino que sí, pero no se si es la palabra adecuada, porque parece que es mérito de uno. Sería dejar el club en una situación muy buena para aquellos que lleguen después, eso es lo importante. También me dicen otros que me vaya ahora que estoy en lo alto. No tengo que pensar en mí mismo y no lo hago.

El mejor. “Me llevé una alegría inmensa cuando Osasuna ascendió contra el Huelva, con los goles de Orbaiz y Trzeciak. Me acuerdo perfectamente de ese día y de esa noche en la Plaza del Castillo”

“Me hace ilusión ser el presidente del centenario, pero lo más importante es que Osasuna lo celebra en Primera División”

“El récord de socios en una situación como esta quiere decir una cosa: que tenemos vida para al menos otros 100 años más”