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Tres navarras, a por el Gayarre

Nerea Berraondo, Marta Huarte y Miriam Zubieta sueñan con una plaza en la finalLas tres jóvenes promesas del canto alaban la experiencia vivida y se muestran satisfechas de sus actuaciones

Tres navarras, a por el GayarreIBAN AGUINAGA

pamplona. El Concurso Internacional de Canto Julián Gayarre comenzó el pasado sábado llenando el Teatro Gayarre de arias, oratorios y lieds. Un certamen musical de gran fama mundial, y en el que, en esta 13ª edición participan tres jóvenes cantantes navarras.

Marta Huarte, soprano de 30 años de Pamplona, actuó el pasado sábado mientras que sus compañeras Miriam Zubieta, también soprano de 22 años, y Nerea Berraondo, mezzosoprano de 22 años, lo hicieron ayer.

Las tres coincidieron en lo satisfactorio de la experiencia, sobre todo, por la posibilidad de cantar en un gran teatro como el Julián Gayarre. "Siendo estudiantes no tenemos muchas oportunidades para cantar en grandes escenarios y es muy importante porque la acústica cambia muchísimo", explicó Berraondo que ha acabado este año sus estudios de grado medio en el Conservatorio de música de Pamplona y el año que viene comenzará sus estudios superiores.

Más emocionada se mostraba Miriam Zubieta, estudiante de canto en la Escuela Superior de Música de Cataluña (ESMUC) y que el año que viene viajará a Viena para continuar sus estudios. "Es la primera vez que canto en el Gayarre y es precioso, me gusta mucho la acústica, además, cantar con público en un teatro es mágico. Lo único que me han faltado son los aplausos", se quejaba en referencia a la petición del jurado de que el público no aplauda a los artistas tras sus actuaciones.

Satisfecha se mostraba también Marta Huarte, que cursa los estudios superiores de Canto en el Liceo de Barcelona. "Cantar en el Gayarre es de las cosas más importantes del concurso pero el hecho de estar en casa también es una responsabilidad adicional porque vienen a verte la familia y amigos, no quieres decepcionar y eso hace que tengas más presión".

Los nervios no se pueden dejar atrás, comentaban las tres, pero reconocieron pasar más nervios antes de la actuación. Después, explicó Berraondo, "lo más importante es meterte en el personaje y eso te sirve para concentrarte" aunque reconoció que a pesar de sentirse tranquila le temblaban un poco las piernas al principio.

"Lo fundamental es no dejarse vencer. Nervios vamos a tener siempre, o eso creo, pero debemos aprender a vivir con ellos y, sobre todo, intentar no luchar contra ellos", añadió Zubieta que aseguraba no haber pasado muchos nervios sino que se había "dejado llevar en el escenario".

Sobre sus posibilidades de pasar a la siguiente eliminatoria, las tres se mostraban prudentes. "Yo no me planteo nada", dijo Marta, "yo venía a vivir la experiencia y ver el ambiente porque sé que hay gente muy buena. Sólo que me cogieran ya es un honor".

En el mismo sentido se pronunciaba Berraondo "yo me apunté para coger experiencia y ponerme a prueba, para ver si era capaz de afrontarlo".

Más ambiciosa se mostraba Zubieta, que ya se alzó con el premio joven promesa en el concurso Luis Mariano de Irún, "yo estoy supersatisfecha y me dolería no pasar, pero soy consciente de que hay mucha gente y muy buena. Sobre todo me gustaría llegar a la final para poder cantar con orquesta", comentaba sincera la soprano.

Todas coincidieron en el difícil trabajo del jurado, que debe valorar a muchos cantantes en poco tiempo con la complicación añadida de que no todos tienen voces iguales ni cantan lo mismo. Sin ir más lejos, Berraondo es mezzosoprano de coloratura, Huarte es soprano lírica y Zubieta, soprano ligera.

Además, apuntaban, cada miembro del jurado tiene unos gustos, unos prefieren las voces más potentes, otros se fijan más en la técnica, otros en la colocación de la voz... "Por eso es tan complicado pasar a la siguiente eliminatoria porque nunca sabes cuales son los gustos del jurado, lo más importante es hacerlo bien y sentirte satisfecha tú", comentaba Zubieta.

Las tres cantantes subrayaron la importancia de la elección del repertorio, una lista de piezas acordes con su voz y sobre todo "que estén muy trabajadas y las domines".

"Yo trato de escoger piezas con las que me pueda lucir, que pueda mostrar algo especial", explicaba Huarte mientras Berraondo y Zubieta asentian.

"Normalmente dejas las dos mejores piezas para la final, para cantar con la orquesta, y luego eliges las de la primera eliminatoria", puntualizaba Zubieta, "yo por ejemplo, busco que sean complicadas y muestren muchos registros". "Sí", confirmaba Berraondo, "lo importante es lucirte en la primera eliminatoria y a ver si hay suerte".