pamplona. El cantante, guitarrista y compositor navarro Josetxo Ezponda, líder del mítico grupo de rock Los Bichos (1987-1991) fue hallado muerto ayer en su casa de Burlada. El descubrimiento se produjo después de que una persona de su entorno llamara a la Policía preocupada por no tener noticias suyas desde hace días, lo que provocó que los agentes se dirigieran a su domicilio, al que accedieron a través de la ventana de un vecino ante la falta de respuesta en su casa. Tras encontrar el cuerpo, se ordenó su autopsia como parte del protocolo habitual en estos casos, pero, tal y como ha podido saber este periódico, no se encontraron evidencias de ningún tipo de violencia, ni externa ni autoinfligida.

El músico, nacido en 1963, revolucionó la escena underground del Estado durante los años 80 y parte de los 90, convirtiendo la banda en un fenómeno de culto respetado por la prensa, por sus colegas y venerado por el público, como quedó de manifiesto por los numerosos comentarios que fluyeron por las redes sociales ayer tras conocerse la noticia.

Josetxo Ezponda irrumpió en el panorama musical en 1978 con Tensión, la primera banda punk de Pamplona. El grupo se disolvió en 1980 y ese mismo año, el cantante se unió a Charly (guitarra) y Asio (bajo) en Neon Provos, cuya andadura se desarrolló hasta 1983. En la primavera de 1986, Ezponda y Charly crearon Flores muertas, con el que quedaron finalistas del I Concurso de rock del Gobierno de Navarra. Y en verano de 1987 se produjo el precedente más directo de Los Bichos, cuando Josetxo, Asio y Charly se juntaron para grabar una maqueta y ofrecer un concierto en Barcelona. Sin embargo, a falta de un batería fijo lo dejaron hasta verano de 1988, cuando Fermín (exFiebre) ocupó ese lugar. A partir de ese momento, se inició una carrera que incluye hitos como el premio del Villa de Bilbao al grupo más innovador, la publicación en 1989 de su primer sencillo, Anita Latigazo, o el cambio de batería ese mismo año, con la entrada de Rubén (exTijuana in Blue), y la edición de su primer LP, Color Hits (Oihuka), que obtuvo críticas excelentes. La misma discográfica publicó en 1991 su segundo disco, Bitter Pink, álbum doble con 27 intensos temas incluido por la revista Rockdelux entre los 100 mejores discos españoles del siglo XX en el puesto 76. Para entonces, las tensiones en el grupo eran muchas, pero, antes de separarse, grabó un mini LP firmado solo por Josetxo, pero interpretado por toda la banda, My Deaf Pink Love (Munster, 1991), con canciones propias y tributos personales.

En 1995, Josetxo Ezponda regresó en solitario con The Glitter Cobweb (Triquinoise), ya como El Bicho, y desde entonces no había vuelto a editar, aunque en 2006 seleccionó para Munster los 36 temas del libro-CD Los Bichos 1991-1988. Sin duda, este fue un grupo único y original, al igual que su líder, que en la letra de Un poco más (Color Hits) decía así: "Así que esto es el fin, no me lo esperaba así... Yo quiero algo mejor, yo quiero más calor, más alma... ¡Ruido! Yo quiero una explosión".