bilbao - El gran tenor catalán Josep Carreras confesó ayer en Bilbao sentirse "feliz" de volver a los escenarios a cantar una ópera completa, como es El juez (los niños perdidos), del compositor austríaco Christian Kolonovits, lo que considera "un reto artístico muy importante". La obra se estrenará el sábado en el Arriaga, donde volverá a representarse el día 29.

El tenor catalán Josep Carreras recordó que llevaba apartado ocho años de la interpretación de una ópera completa, aunque en este tiempo ha ofrecido conciertos y recitales, y manifestó encontrarse "estupendamente bien" de salud, "después de un momento difícil en mi vida". Esta circunstancia le ha dado "ánimos y fortaleza" para enfrentarse con una obra "complicada", como suelen ser las contemporáneas, dijo, con una duración de dos horas y media. Con libreto de la dramaturga y regidora austríaca Angelika Messner, acompañarán a Carreras en los principales papeles del reparto el tenor pamplonés José Luis Sola y la soprano tafallesa Sabina Puértolas, que encarnan los papeles principales junto al bajo italiano Carlo Colombara y la mezzo Ana Ibarra. La dirección musical corre a cargo del maestro David Giménez y la escénica, de Emilio Sagi, responsable artístico del Teatro Arriaga de Bilbao.

Carreras encarna al protagonista de la obra, un juez que está manipulado por un sector de la sociedad que justifica y ampara el robo de bebés y que acepta cosas que, con el tiempo, se da cuenta de que no se pueden aceptar, por lo que rompe con esa actitud y se convierte en un paladín de la justicia. Preguntado sobre si, tras este estreno, habrá continuidad en su presencia en óperas completas, Carreras contestó con un escueto "no lo sé". "Primero, quiero ver cómo me siento y cómo el público acepta esta obra", dijo. "Esto no quiere decir -apuntó- que tenga que continuar haciendo esta ópera solamente, sino que puede ser que me vuelva (a entrar) el gusanillo del escenario, de los colegas, de los trajes, del maquillaje..." Carreras confesó que su vocación por la lírica es lo que le ha dado "la fuerza y la energía" para emprender nuevos retos: "Este ha sido el caso, la ilusión de pisar de nuevo el escenario representando un personaje".

El cantante alabó a sus compañeros de reparto, de quienes dijo que "todos y cada uno de ellos son perfectos para el personaje que representan, tanto en lo vocal como en lo escénico", y al director de orquesta, David Giménez. Según Carreras, las condiciones que se dan son "óptimas" para que "todo salga tal como deseamos". El maestro Giménez ha señalado que la partitura creada por Christian Kolonovits tiene "características muy especiales" que hoy en día "no se encuentran fácilmente". A su juicio, la obra del compositor austríaco combina elementos "muy clásicos" con una estructura "típica" de arias y duetos, y con otros completamente "ajenos" al mundo de la ópera, como son "ritmos y armonías más propios del pop o del jazz". Posee también una instrumentación que "muchas veces" recuerda a Strauss y a Puccini por "la densidad, los colores y la dificultad"; en resumen, ha señalado, una combinación "muy nueva y muy excitante". - Efe