PAMPLONA. Reinventarse o morir. Es la filosofía que en los últimos años ha aplicado la Coral San José Abesbatza de Pamplona, que hoy celebra su 60 aniversario con un concierto en la iglesia San José a las 20.30 horas. Formado por 37 personas y un conjunto instrumental, el coro ha evolucionado desde su nacimiento en 1955, y ha pasado de ser un grupo musical “de barrio” a convertirse en un referente cultural de la Chantrea, al especializarse en música contemporánea y poner el foco de atención en las nuevas tendencias, con el objetivo de no quedarse anclado en el pasado.

Fue el sacerdote Manuel Elvira, de la parroquia San José de la Chantrea y alma mater de este coro, quien puso el germen de lo que hoy es la Coral San José Abesbatza, con la intención de dar “un toque de calor y color a las celebraciones litúrgicas”. Así, después de un oficio, planteó la posibilidad de aprender a cantar a quienes estuvieran interesados, exigiendo a cambio “nada más que ilusión y ganas de trabajar”, y se gestó la base de este conjunto musical, que pronto aprendió a cantar canciones a voces (polifonía) y no solo canciones religiosas; un grupo que grabó una decena de discos y que llevó su música a cientos de localidades navarras, además de Barcelona, Ibiza, Teruel, Valencia y Zaragoza, entre otros, e incluso Francia.

Esta etapa se cerró tras el fallecimiento de Elvira en 2001, y después de una fase de dudas e incertidumbre sobre el futuro del conjunto, la Coral San José Abesbatza se reinventó cuando Carlos Etxeberria cogió las riendas y se convirtió en el director. “En la época anterior eramos un coro más parroquial, más cerrado. Ahora hemos cambiado el estilo, el repertorio, hacemos música contemporánea, a poder ser del siglo XXI, y tocamos a la par con una orquesta. Todo esto pienso que nos ha dado bastantes vuelos y nos conoce bastante gente”, señala Isabel Estremera, miembro del coro y de la Junta Directiva.

El director Etxeberria cree que este cambio era necesario “para salir de los programas tradicionales en los que solo hay folclore o polifonía” y comenzar a desarrollar “programas más completos”. “Quería aportar algo nuevo en el mundo coral. Estaba cansado y creo que si te cansas, te aburres y no tienes ilusión, no generas esa ilusión en el público. Y como gusta a la gente, nosotros encantados”, afirma Etxeberria. En este sentido, para Estremera, el cambio es también consecuencia de la proliferación de conjuntos corales: “Hay mucha competencia y si no haces algo diferente, lo haces bien y tienes suerte, es muy difícil destacar”. “Ha habido un cambio brutal en nuestra forma de cantar. Al principio cantábamos bien pero eramos un coro para andar por casa”, añade Tomás Jaso, otro de los directivos y miembros del coro.

señas de identidad Para Jaso y Estremera, “la técnica de canto” y “el tipo de música” son las señas de identidad de este conjunto, pero otros miembros añaden que la disciplina y buen ambiente que tiene el grupo también les ayuda a ser quien son. “Nos caracteriza el trabajo, el tesón y la constancia. Tenemos disciplina y a la vez hay muy buen ambiente. El horario de ensayo se respeta y el director saca lo mejor de nosotros. No sabemos si otro lo hubiera conseguido porque somos muchos y hay mucha variedad entre nosotros”, interviene María Casajús, otro de los miembros y de la junta del grupo musical. “No somos un coro que nos juntemos dos días a la semana simplemente para cantar. Nos lo tomamos como profesionales”, resume Marifé Muro, que también forma parte del coro y de la junta.

Esta diferenciación a través de la música, el repertorio y los programas generalmente monográficos que realizan, es lo que les lleva a afirmar que, en época de crisis y de explosión de grupos musicales distintos, la Coral San José Abesbatza está interpretando más conciertos “y de mayor calidad” que antes. “Es una música novedosa que aquí antes no había hecho nadie y, aunque los conciertos sean más caros porque llevamos un conjunto instrumental, desde que empezamos con esta dinámica estamos teniendo más actuaciones y mucho mejores”, asegura Estremera.

Pese a ello, el grupo musical no se libra de encontrarse “en un riesgo económico” debido a la reducción de ayudas y subvenciones del Gobierno de Navarra y al tipo de convocatoria; una convocatoria que, en su opinión, debería ser plurianual para que las asociaciones culturales supieran con qué presupuesto cuentan a la hora de desarrollar sus programaciones, actos o conciertos. “Es un problema muy serio porque te tienes que lanzar a programar sin saber si te van a retribuir después”, afirma Jaso.

Pero tienen confianza en el futuro, en los jóvenes que conforman y han conformado el coro, porque aunque muchos hayan tenido que dejarlo por no poder compatibilizarlo con sus estudios, creen que volverán muy profesionalizados. Confían además en poder seguir “en la misma línea que tenemos ahora y que tanto nos gusta”, y continuar creciendo musicalmente y formando equipo, como han hecho durante 60 años.

el concierto

Hoy, a las 20.30 horas. La Coral San José Abesbatza celebrará su 60 aniversario con un concierto en la iglesia San José.

Recorrido por los últimos años. La actuación será una recopilación de los últimos cuatro años de trayectoria de la coral. “No es un recorrido por los 60 años, más bien una muestra de esta nueva etapa en la que estamos inmersos, a través de obras importantes y difíciles”.

Programa monográfico. El concierto se centrará en distintas obras de Karl Jenkins, fusionando textos tradicionales orientales y de diferentes religiones con poemas haikus japoneses relacionados con la naturaleza, los cambios de estaciones o los fenómenos naturales.