Síguenos en redes sociales:

“Quizá Bárcenas vea la ceremonia desde Baqueira...”

“Nervioso”, pero “con ganas de disfrutar”. Así afrontará el director navarro la gala de los Goya de mañana. Cita a la que su ópera prima ‘B’ concurre con tres nominaciones

“Quizá Bárcenas vea la ceremonia desde Baqueira...”

pamplona - Ya ha recibido varias distinciones, pero no se acostumbra a estos eventos. “Me siento como pez fuera del agua”, dice Ilundain (Pamplona, 1975), muy contento de que se haya reconocido “un trabajo que ha costado tanto esfuerzo” y que crítica y público han calificado de necesario. Él mismo aspira a un Goya en la categoría de Guión adaptado y sus actores, Pedro Casablanc y Manolo Solo, optan en las de Mejor actor protagonista y de reparto, respectivamente.

Enhorabuena por el premio Feroz y por los que han concedido a B desde el programa Días de cine. ¿Cómo le han sentado? ¿Qué significan a título personal y para el proyecto?

-Significan reconocimiento a mucho trabajo. Pero hay tantas películas con mucho trabajo detrás, que no te puedes sentir como el mejor. No es una competición, es una fiesta en la que, de alguna manera, nos hemos colado. Estamos contentos por todos los que creyeron necesaria esta película y nos ayudaron. Por todo el equipo.

¿Qué balance hace, cuando han pasado unos meses del estreno, de lo que ha supuesto B para el cine español?

-La verdad es que ahora escucho muchas buenas críticas y muchos compañeros de profesión que la descubren gracias a los premios, así que, bienvenidos sean. Si además hemos abierto una puerta para hacer este cine sobre temas políticos que tan bien hacen los anglosajones, sin miedos ni cicatería, bienvenido sea lo que nos ha costado sacarla adelante.

Ahora que apenas quedan unas horas para los Goya, ¿qué le gustaría que sucediera esa noche?

-Que se repartan los premios, que creo que ocurrirá. Hay trabajos muy destacados en diferentes películas.

¿Irá con nervios o, como B ha estado nominada en todos los premios de la temporada, ya se ha acostumbrado a estas situaciones?

-No me he acostumbrado. Me siento un poco como pez fuera del agua. Pero conviene estar tranquilo y disfrutar.

Han llevado a Bárcenas hasta los Goya, el tipo igual les está agradecido y todo.

-Supongo que tiene una media sonrisa. Que la vanidad la tenemos todos y, que hablen de ti, la engorda. Él es protagonista y casi guionista de esta historia. El decidió qué contaba y qué callaba. Quizás vea la ceremonia desde Baqueira...

Sin duda, el caso Bárcenas está más vivo que nunca, ahora con la reapertura de la causa por la destrucción de los ordenadores, ¿el cine también juega un papel político en esta sociedad?

-El cine es un relato. Una forma de contar. Cada historia tiene diferentes formas de contarse, diferentes puntos de vista. Es muy importante contar que aquella fiesta “por encima de nuestras posibilidades” de la que nos hablaron cuando la economía colapsó y se empezó a desahuciar por no pagar las hipotecas, era la fiesta “por encima de sus posibilidades” y la factura, por encima de las nuestras.

¿Qué ha sido lo mejor y lo peor de este proyecto?

-Lo mejor, conseguirlo desde abajo, con ayuda de tanta gente: coproductores con ahorros y mecenas con pequeñas cantidades. Lo peor, la otra cara de esta moneda, que aun hoy, un proyecto de calidad contrastada, sobre el caso más notorio de corrupción, no haya sido de interés para ninguna televisión en abierto. Estamos seguros de que haría una gran audiencia. ¿Por qué ninguna televisión lo programa?

De alguna manera, ha demostrado que se puede hacer cine de calidad sin presupuestos millonarios. Igual que David Ilundain, otros cineastas han apostado por hacer sus proyectos de bajo coste sin esperar a las subvenciones, ¿es este un nuevo camino que abre una nueva generación de cineastas en España?

-Es un camino insostenible. El cine es caro. No puedo afrontar otro proyecto así porque pierdes dinero y ni siquiera has pagado el sueldo que merecería tu equipo, sino el sueldo mínimo del convenio del sector. Yo no he cobrado. Esto se puede hacer una vez, pero no es un modelo. Que nadie se engañe. Lo que ocurre es que hay veces que sientes que, a pesar de todo, hay que hacerlo.

¿En qué proyectos trabaja ahora? ¿Cuáles son los temas que más le interesan como creador audiovisual?

-Hay un abanico de temas. Pero todavía no lo se. Una película es un viaje de 3 o 4 años. Hay que pensar a qué vas a dedicar tanto tiempo.