desde el corazón de Iruña, concretamente en el Pabellón de Mixtos de la Ciudadela, Xabier Soubelet comenzó la presentación de su exposición Abstrootism de forma clara y directa: “Me voy a definir como un pintor del Baztan”. La muestra del pintor estará abierta al público hasta el 7 de mayo y reúne las obras de este artista, caracterizadas por su gran colorido en un estilo definido por él mismo como expresionista con tendencia abstracta.
“Es una exposición de paisajes muy coloridos, pero eso no significa que siempre sean alegres”, adelantó Maitena Muruzábal, directora general del área de Cultura del Ayuntamiento de Pamplona, que ayer acompañó al artista afincado en Baztan durante la presentación de la exposición.
Un total de 54 cuadros componen Abstrootism, una exposición en la que Soubelet realiza una interpretación de su entorno, recoge los movimientos artísticos históricos pasados, su propia herencia pictórica local y las raíces ancestrales de su tierra natal y familiar.
desde apezetxea a cézanne Hace más de cuarenta y dos años que Xabier Soubelet comenzó a pintar en el Baztan, a caballo entre Arraioz y Erratzu. Lo hizo en compañía del que fue su primer maestro, Jose Maria Apezetxea, pero siguió también de cerca a otro pintor, si bien no estaba presente físicamente. “Tuve una influencia notoria de Apezetxea y también de Cezanne. No estaba él, pero por la manera de pintar de Jose Mari sí que estuvo. Es lo que a mí me atrajo”, desveló Soubelet.
Por aquel entonces, los pintores del Baztan, como comentó ayer Soubelet, pintaban impresionismo puro y postimpresionismo, con una gran influencia de Cézanne. La composición y la construcción de cuadros del artista francés es algo que ha quedado con influencia en Xabier, si bien él fue más allá. “Llega un momento en el que me faltaba algo. Cézanne me encanta, pero le encuentro cierta falta de color”, afirmó ayer el pintor nacido en Ziburu.
Soubelet se pasó al expresionismo de influencia alemana, acercándose a tendencias artísticas como el die brücke. Entonces descubrió no solo en la historia del arte, sino que su propia forma de pintar se encaminaba hacia la abstracción, hacia pintores como De Kooning, Van Velde... “Toda una clase de pintores abstractos, pero algunos de ellos, como los Van Velde, con sus raíces”, declaró Soubelet. Algo clave para el pintor del Baztan ya que, como ayer dejó claro, él también mantiene las suyas propias: “Mi pasión ha sido siempre nuestro país y nuestra lengua, el euskera. Hasta pintando, esas raíces tienen que estar presentes dentro de un camino hacia la abstracción”.
El término moderno no le termina de encajar al pintor, pero ayer lo mencionó a la hora de especificar su estilo, en una personal definición: “Pintar de una forma moderna para representar el paisaje del cual me quiero escapar, pero que esta aquí. Por ello las palabras raíces y abstracción, es eso”, detalló Soubelet.
Una escapada pero no solo del mismo paisaje, sino también del propio color habitual del Baztan. El salirse de lo que se ve por costumbre, de lo convencional. “No son mis ojos que miran los que están reflejados en el cuadro, sino que es un reflejo de lo de dentro”, definía ayer el pintor, incidiendo en que, al fin y al cabo, los ojos son como la mano, un aspecto de técnica. Él busca salirse de todo eso, tanto en la forma como en el color y la luz.
mezcla abstracta y figurativa Las obras que componen la muestra son muy variadas. “Hay de todo: cuadros más abstractos, otros que lo son un poco menos... Es una mezcla de abstracción y figurativo, figurativo siempre de tal manera que dentro de la abstracción hay un pequeño toque que sitúa a esa abstracción”, explicaba ayer su autor.
Como ejemplo, Soubelet mostró una obra donde podía identificarse un portillo, un detalle que transformaba el cuadro en paisaje abstracto. O una urbanidad gris donde destaca el Central Park, como parque dentro de la ciudad, volviéndolo paisaje; una línea de fondo que delimita un monte sumergido en una tormenta azul... “Dentro del camino que lleva hacia la abstracción, siempre hay un toque figurativo”, concluía el pintor.
Soubelet, además de pintar, también es escritor y cantautor, y a la muestra de cuadros le acompañan una serie de libros de poemas y novelas con su firma. Son ocho en total, ya que el noveno aún no está terminado, aunque sí desveló hacia dónde va: acompaña a un cuadro que conmemora, de manera personal, el 80 aniversario del bombardeo de Gernika: “Una manera abstracta y colorida. Colorida porque han pasado ochenta años y la esperanza y el porvenir nos ha mostrado que Gernika es alegre. Es triste y alegre a la vez”, desveló ayer el pintor.
Fue en 1975 cuando Xabier Soubelet realizó su primera muestra, y su obra durante estos años ha ido evolucionando. Como recoge el catálogo de la exposición, el pintor ha ido madurando en autonomía creativa, dejando a un lado los modelos de paisajes y acercándose a una abstracción casi completa. Una evolución que, sin embargo, nunca escapa del todo de sus raíces. Abstrootism lo demuestra.
Horario. El horario de visita es de martes a viernes, de 18 a 20.30 horas. El sábado amplia a mañana y tarde, de 12 a 14.00 horas, mientras que el domingo solo de mañana, de 12 a 14.00 horas. Estará abierta al público hasta el 7 de mayo.
Muestra variada. Además de los 54 cuadros que componen la exposición, ‘Abstrootism’ también se completa con el apoyo de ocho libros de poemas y novelas escritos por el artista.