pamplona - El Bardo pone en escena al bardo por excelencia. Después de transitar por textos de grandes como Lorca, León Felipe, Sófocles o Alfonso Sastre, la compañía de teatro amateur navarra se enfrenta por primera vez a Shakespeare con una de sus comedias más conocidas, Mucho ruido y pocas nueces, cuyo estreno está previsto para hoy, sábado, a las 20.00 horas en la casa de cultura de Villava, donde se representará también mañana a la misma hora.

Después de La taberna fantástica, Pablo Asiain vuelve a ponerse al frente del grupo para dirigir esta obra “de la que han bebido tantas comedias románticas cinematográficas”. No en vano, los enredos, los engaños, los trucos, los juegos de palabras, los duelos a ingenio y el amor latente y evidente están a la orden del día en esta historia contada con 16 actores y actrices sobre las tablas, incluido un músico, el concertista Ander Percaz, que, además de dar vida a Conrado, hilará las escenas interpretando distintas melodías en función de cada contexto y grupo de personajes. “Tras años de tragedias y dramas, queríamos dar un giro y hacer comedia, y como hasta ahora habíamos trabajado con autores muy reconocidos, queríamos seguir haciéndolo, abordando, por primera vez, al bardo que nos da nombre”, comenta Asiain, que dice que han recortado algunas escenas del texto original “para darle más agilidad”, aunque “el resto lo hemos respetado al máximo”, con “alguna licencia al final”.

escenario, vestuario, luces El Bardo también se ha permitido jugar con la escenografía, la iluminación y el vestuario. “Hemos querido aportar algo distinto, como grupo amateur siempre podemos arriesgar más que el sector profesional y lo hacemos”, indica el director. El actor Javier Chocarro, que encarna a Don Juan, se ha ocupado de la producción, contactando con Cristina Palacios y Mamen Herández, o lo que es lo mismo, Zenzerro, para los decorados. “Son artistas con una calidad contrastada y como no iban a recibir la remuneración que merecen, al menos han podido trabajar con mucha libertad”, señala el intérprete. Y sigue: “Nos presentaron una propuesta muy loca, inspirada en el cómic, y otra más clásica, y decidimos optar por una a medio camino entre las dos”. En ese sentido, la escenografía es en blanco con trazos negros, “en homenaje a Forges”, lo que ha permitido a José Mari Ballesta diseñar una iluminación original que genera distintos espacios y atmósferas, así como la noche y el día. “Queremos que el público salga con la sensación de haberse divertido y de haber disfrutado de una propuesta estética interesante”, agrega Chocarro, que también subraya la labor realizada por Ilazki Martirena con el vestuario. “Está muy bien por que el vestuario distingue la posición social de los personajes”, apunta Iñaki Esparza, coprotagonista junto a Carol Vázquez (Beatriz) del montaje en su rol del aparentemente descreído Benedicto. Así, los personajes pertenecientes a la realeza y a la corte irán vestidos con uniformes militares, frente a los políticos, con traje, y al pueblo, ataviado con ropas más sencillas. Para Esparza, interpretar un Shakespeare es “una oportunidad que muy pocos actores tienen”, y de Benedicto, “el chulito de la época”, destaca que lo más complicado ha sido “mantener el lenguaje del original y naturalizarlo sin pasarme”, así como los monólogos que tiene a lo largo de la obra.

La obra. Mucho ruido y pocas nueces, de W. Shakespeare.

Compañía. El Bardo.

Función. Hoy y mañana, a las 20.00; casa de cultura de Villava.

Dirección. Pablo Asiain.

Escenografía. Zenzerro.

Vestuario. Ilazki Martirena.

Música en vivo. Ander Percaz.

‘Fake news’. La comedia gira en torno al efecto del cotilleo y los rumores, un tema de actualidad que nos remite a las redes sociales y a las fake news.