Aventuras, amor y superación de esto trata el primer libro de la navarra Rebeca Gascue. Bajo el título de Al final de la escalada, la autora narra las adversidades que padeció la jóven María, protagonista de la historia, escalando una montaña con su grupo de amigos. Aunque ella había dedicado muchos años a perfecccionar este deporte, acaba perdiendo por culpa del tiempo adverso al amor de su vida. Pese a esto, la protagonista termina llegando a la cima de la montaña donde le esperaba un hallazgo.

Rebeca Gascue tenía una librería en Mendebaldea, Librería Echegoyen. Desde los 16 años ya estaba sumergida en el mundo de la literatura de la mano de autores como Unamuno. Tras ser diagnosticada con la enfermedad de escleriosis múltiple se prejubiló a los 46 años y decidió emprender el camino de la escritura y la literatura que tanto le apasiona. “Poseí durante muchos años una librería en esta ciudad. Mi relación con la literatura es estrechísima. Son tantísimos años manejando libros, leyéndolos y aconsejando lecturas, hasta que me decidí yo misma a escribir mi propia novela. Así surgió Al final de la escalada, un carrusel de emocion que no deja indiferente a todo aquel que haya experimentado lo que supone vivir; Tal vez como una dificultosa y dramática ascensión hasta una cima incierta que nos ha de deparar sorpresas. El afecto de los seres que amamos es lo que nos ayudará, sin duda, a soportar las penalidades de la ascensión”, comentó Gascue sobre su obra.

La autora comenzó a escribirla en plena pandemia y reconoce que solo le costó dos meses terminarla, “ya que tenía la idea muy clara de lo que quería hacer”. “Siempre he tenido ideas a la hora de escribir, pero la verdad que esta historia ya la tenía formulada en la cabeza. Quería tener unos personajes muy marcados y carismáticos que convirtiesen la trama en una montaña rusa. Es una novela realista pero con un toque mágico para hacerte fantasear”, agregó la escritora.

“Es un libro donde el amor, el desengaño, la muerte y la enfermedad se enlazan de forma extremadamente conmovedora una vez que conoces a los personajes. Tiene lo necesario para ser un drama estupendo que engancha desde el principio. Los lectores me han dicho que les produce ansiedad, de la buena, por acabarlo pues tiene un final inesperado. No se sabe en todo el libro lo que va a ir aconteciendo”, afirmó Gascue.

Planes de futuro

La escritora navarra ya está pensando en crear un nuevo libro, aunque no pretende hacer una segunda parte de Al final de la Escalada. “Tengo entre manos algunas ideas, pero aún quiero darle unas vueltas. Quizá comience a escribir sobre una historia emotiva ubicada en la antigua Versalles y la gente que la habitaba en aquellos años”, concluyó Rebeca Gascue.