Con frío, niebla y una lluvia intermitente se esperaba ayer la llegada de los reyes a Roncesvalles para conmemorar el Año Jacobeo 2021-2022, un acto en el que se ensalzó el Camino de Santiago como un “símbolo de unión” y que tuvo lugar a lo largo de la mañana de ayer, 12 de julio, con la presencia del Ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, y representantes de los gobiernos de las comunidades autónomas por las que transcurre el Camino de Santiago, entre ellas, por supuesto, Navarra.

Estaba previsto que el acto comenzase a las 11.30 horas, pero el planning se vio truncado debido a una fuerte niebla que no dio tregua en toda la mañana. Así, los reyes, que esperaban aterrizar en el Alto de Ibañeta, tuvieron que ser desplazados con su helicóptero hasta Nagore, donde les esperaba un coche que les llevaría hasta -ahora sí- el Alto de Ibañeta. Allí se encontraba una comitiva formada por la presidenta de Navarra, María Chivite, el ministro Luis Planas y cinco presidentes autonómicos más -de Castilla y León, Aragón, La Rioja, Cantabria y Galicia-, además de representantes políticos de los gobiernos de la CAV y Asturias. Mientras tanto, en los alrededores de la Colegiata de Roncesvalles un pequeño grupo de personas -que en ningún momento llegó a superar las cincuenta- esperaba impaciente la llegada de Sus Majestades y el resto de autoridades, haciendo frente a los fríos 12ºC que reinaron durante toda la mañana.

Siguiendo con su itinerario, aunque media hora más tarde de lo previsto, los reyes y el resto de autoridades recorrieron a pie el kilómetro y medio del Camino de Santiago que une el punto de partida -Ibañeta- con Roncesvalles. Y esto, cabe destacar, sin ningún incidente, a pesar de la preocupación de algún vecino que aguardaba su llegada por las condiciones del camino, embarrado seguramente debido al mal tiempo. Ya en Roncesvalles, todo el grupo se dirigió a la capilla del Sancti Spiritus, antiguo cementerio de peregrinos, donde tuvieron la oportunidad de conocer los trabajos de arqueología que tienen lugar en ese espacio. De ahí, minutos más tarde, se desplazaron hasta el monumento que conmemora la Batalla de Roncesvalles y, seguidamente, se dirigieron a la Casa Prioral, en donde firmaron en el Libro de Oro de Navarra.

Acto seguido, reyes y representantes políticos se dirigieron a la iglesia de Santa María, donde les recibió el arzobispo de Pamplona y obispo de Tudela, Francisco Pérez. Dentro de la iglesia, además, se encontraban otras autoridades y representantes políticos, como Elma Saiz, consejera de Economía y Hacienda del Gobierno de Navarra, o Rebeca Esnaola, consejera de Cultura, entre otros. Fue en el interior de este templo de estilo gótico francés donde tuvo lugar el acto institucional conmemorativo del Año Jacobeo y donde los representantes de las diferentes comunidades autónomas por las que pasa el Camino de Santiago dedicaron unas palabras a los presentes.

En sus discursos, todos los presidentes autonómicos coincidieron en ensalzar los valores del Camino como “símbolo de unión”, además de subrayar la necesidad de llevar a cabo políticas de colaboración entre los diferentes gobiernos autonómicos. También lo señaló así el Ministro de Agricultura, Luis Planas, quien destacó la colaboración existente entre las diferentes administraciones y comunidades del Camino de Santiago. El ministro aseguró que le “enorgullece” destacar ese modelo como “un modelo de cooperación, esfuerzo y de trabajo conjunto”, dentro del que ha hecho especial mención a la tarea de todos los Ayuntamientos. Y en la misma línea se pronunció el rey, quien apuntó: “En estos momentos necesitamos reencontrarnos con todo lo que acompaña y genera el Camino a Santiago”.

Durante el acto, que finalizó pasadas las 14.00 horas, se contó con la actuación musical de la soprano Raquel Andueza, quien estuvo acompañada por el grupo La Galania (Pablo Prieto, violín, y Jesús Fernández Baena, tiorba). Los músicos interpretaron tres piezas musicales de los siglos XVII y XVIII que maridaban a la perfección con el entorno y el motivo del acto. Al término de los discursos, la comitiva se desplazó a la capilla donde se encuentra el sepulcro del rey de Navarra Sancho VII el Fuerte, ante cuya tumba se realizó una ofrenda floral.

Una vez dado por finalizado el acto en conmemoración del Año Jacobeo 2021-2022, los reyes se dirigieron a los jardines exteriores de la Colegiata donde serían recogidos. En el transcurso de todo esto, se oyeron unos muy escasos aplausos y gritos en alabanza a la Casa Real, mientras la mayoría del público congregado permanecía impasible ante la salida de los reyes, tal vez por la larga espera, tal vez por el frío que no dio tregua, o tal vez porque la curiosidad que allí les había reunido ya había sido saciada. En cualquier caso, si algo quedó claro después de la jornada de ayer es que el Camino de Santiago es un punto fundamental en la relación entre comunidades y un patrimonio cuya preservación debe ser primordial.