Alicia Borrachero (Madrid, 1968) es una actriz muy reconocida por sus personajes y popular por Periodistas, Hospital Central y otras series. En estos momentos, espera el estreno en Cuatro de la coproducción hispano-italiana Los relojes del diablo.

1 Nacimiento con amor. Se ríe cuando se le pregunta cuán amorosa es después de haber nacido un 14 de febrero. Para ella el amor es muy importante, y siempre que puede hace un guiño a su marido, el actor americano Ben Temple.

2 Viajes de ida y vuelta. Hollywood es el sueño americano de muchos actores y actrices. Ella ha trabajado en varias producciones estadounidenses, pero siempre haciendo el viaje de ida y vuelta. Al menos por el momento, no está dispuesta a cambiar de continente.

3 Referenciales. Hay dos personajes interpretados por Alicia Borrachero que son referentes para los espectadores: lo que asumió en Periodistas y en Hospital Central, pero ha estado en casi todas las grandes: 7 vidas, Médico de familia, Farmacia de guardia...

4 Malas críticas. Hay actores que no leen ni lo bueno ni lo malo que se escribe de ellos. Ella sí que lo hace; piensa que se puede aprender de ellas por muy malas o injustas que le parezcan, aunque reconoce que algunas han sido innecesariamente duras.

5 La pianista. Ser actriz era algo que siempre le fascinó, pero en su sumario de intenciones había más proyectos. Uno de ellos era convertirse en pianista profesional. La música es muy importante para ella, pero hoy solo a nivel personal.

6 Supersticiosa. Aunque siempre se muestra muy racional y su criterio parece terrenal a tope, también tiene sus creencias supersticiosas. No son muchas, pero cuando derrama una copa de vino por accidente se moja con el líquido la frente para llamar a la fortuna.

7 Solo drama. No es que ella no tenga sentido del humor, que lo tiene, pero a la hora de trabajar siempre está inmersa en dramas. Aún no ha hecho comedia, algo que le gustaría. Espera tener pronto noticias en este sentido y poder hacer reír al público.

8 Aficiones. Soporta bien la fama y cree que es de agradecer que el público se acerque a ella (con educación). En cuestión de aficiones se considera muy común: familia, amigos, leer, música o viajar. Más o menos, como el vecino de enfrente.

9 Ordenada. Le gusta mucho que todas las piezas encajen en su lugar. No le va lo de improvisar en la vida y se siente segura cuando ve todo en orden, aunque no quiere que se le considere una maniática en este sentido.

10 La culpable de su vocación... Es su abuela, la involuntaria responsable de que cambiara la música por la interpretación. Ella solía llevarla al teatro siendo una niña, y cuando vio un musical se quedó tan impresionada que dijo que quería ser actriz.