- La crisis del coronavirus hizo retroceder al mercado español del arte más de media década. Las ventas descendieron 308 millones de euros en 2020, una caída del 37% que fue el doble de la registrada a nivel mundial y llevó a niveles de 2014, según se desprende de un informe de la Fundación “la Caixa”.
Pese a los datos negativos del documento El mercado español del arte en 2021 presentado hoy en Madrid, el sector ha demostrado en la última década “mejor resiliencia” que otros mercados, probablemente en parte por las lecciones aprendidas en la anterior crisis.
Así lo explicó ayer la doctora Marta Pérez Ibáñez, del Instituto de Arte Contemporáneo, que ha coordinado el estudio encargado por la Fundación “la Caixa” y con la colaboración de ARCO
El mercado del arte en España es en muchos sentidos “débil, precario y dependiente de ayudas”, pero también es “tremendamente productivo y creativo”, precisó.
El “shock” de la pandemia se tradujo también en un impulso de las ventas en Internet, que se duplicaron a nivel mundial en 2020 y también en España, con un aumento similar: del 10% de ventas de canales en línea registrados en 2019 al 22% el año pasado. Uno de los datos más importantes de esta subida es que cuatro de cada diez comprados que optaron por este canal eran nuevos clientes con los que las galerías nunca habían tenido contacto.
La sensación entre los galeristas entrevistados es que este movimiento en línea “continuará a corto y medio plazo”, independientemente de cómo se desarrolle el contexto de las ventas presenciales.
“La pandemia ha obligado a implementar nuevos canales de comunicación, más ambiciosos e internacionales -indicó Pérez Ibáñez- y que demandan una buena estrategia de comunicación”.
El informe, el único centrado en el mercado español y del que se han publicado ediciones en 2012, 2014 y 2017, arroja un mapa del mercado del arte con gran protagonismo del sector contemporáneo (69% del total de operadores) y muy concentrado en Cataluña y Madrid. El perfil del comprador es mayoritariamente hombre, con edades comprendidas entre los 40 y los 60 y fundamentalmente españoles (70%).
Los artistas representados por las galerías siguen, curiosamente, un patrón similar: son mayoritariamente hombres, españoles, de media carrera -con una trayectoria más o menos reconocida- y prioritariamente pintores.
El perfil de las galerías de arte contemporáneo es de una empresa joven, un tercio de ellas con menos de diez años de vida. Muchas nacieron después de la crisis de 2008 y suelen tener un modelo de negocio “más globalizado, digital y abierta al mercado internacional”.
Su tamaño es el de una pyme, que en su mayoría (75%) facturan menos de 250.000 euros al año. Unos datos “muy por debajo del mercado global” y que se debe en gran medida a que “los precios en España son muy bajos”, con una media de compra entre los 1.000 y 10.000 euros.
Pese al impacto de la covid-19, las conclusiones del estudio arrojan una imagen de un mercado “muy activo”, reiteró Pérez Ibáñez. Las perspectivas son también buenas, pese a que la incertidumbre se mantiene. El optimismo de los galeristas ha subido respecto al año pasado: el 44% confiaba en que las ventas aumentaran a corto o medio plazo, frente al 16% que lo esperaba el año pasado.
