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La M.O.D.A.: "Grabar con Gorka Urbizu tendría que ser un derecho universal para cualquier grupo"

Los burgaleses son una de las bandas que encabezan el cartel del festival Estaciones Sonoras de Primavera, que se celebrará en Cascante este viernes y sábado

La M.O.D.A.: "Grabar con Gorka Urbizu tendría que ser un derecho universal para cualquier grupo"Sharon López

Con la humildad y cercanía que le caracteriza, David Ruiz, vocalista y guitarrista de la M.O.D.A. desgrana los detalles de su último disco, Nuevo cancionero burgaléscon el que han recuperado canciones tradicionales de su tierra. Y que, además, es el debut como productor del navarro Gorka Urbizu.

Ha pasado menos de un año de su último concierto en Pamplona y la Maravillosa Orquesta del Alcohol ya está de vuelta por Navarra. ¿Aquí casi juegan ya en casa?

-Somos pesados (risas). Pero siempre hemos estado a gusto tocando en vuestra tierra y mientras la gente no se canse de nosotros, estamos encantados de volver. Es muy flipante además volver al Estaciones Sonoras: nos sigue pareciendo una especie de milagro que un pueblo de 4.000 personas tengan el festival que montan, con todas sus actividades paralelas. Molaría que otra gente intentase montar un evento en su tierra y se pudiesen dar casos iguales, porque participa toda la gente de allí, da igual la edad. Se vuelcan en el proyecto y su tierra, se siente orgullosa y conecta mucho a la gente con su pueblo y su comarca.

Regresan para presentar su último disco, Nuevo Cancionero Burgalés

-Empezó a raíz de conocer otras propuestas y músicos, nos despertó esa curiosidad por la música del lugar que venimos. Veíamos que había folclores en otras tierras y el nuestro no lo teníamos muy estudiado. Aquí ni en el colegio se habla de ese folklore propio y si no tienes la suerte de que en tu familia haya tradición musical, no llegas a ello nunca. Empezamos por Internet rebuscando entre archivos que tenían grabaciones históricas y cuando descubrimos los cancioneros de Federico Almeda y José Antonio, alucinamos. Nos pusimos a trabajar sobre esos textos escogiendo las frases que más nos gustaban, reconstruyéndolas y creando una música nueva. Y ese es el Nuevo Cancionero Burgalés, ese es nuestro ultimo disco.

¿Fue un reto musicar textos ajenos?

-Sobre todo porque salvo Mes de mayo, que está la letra original de principio a fin, el resto de letras no existían como tal, hemos mezclados versos y era un trabajo difícil, porque estás cantando canciones que han sobrevivido a más de cien años. Queríamos ser respetuosos, nosotros acabamos de llegar pero ese folklore está ahí y hemos podido llegar a él gracias al trabajo desinteresado y pasional de mucha gente. Nos sentimos muy orgullosos de llevar el nombre de Burgos allá donde vamos y este es un disco donde hablamos de nuestra tierra, pero cada uno tiene un Burgos en su corazón y en su mente. No creemos que sea un disco localista o que intente imponer que esto es lo mejor, sino al revés: es nuestra manera de mostrar lo que aquí se hace y manera de conectarnos con gente de otros lugares y poner en común que hay muchas cosas que compartimos.

El poder de la música.

-Mucha gente nos ha escrito desde Andalucía, Galicia o Asturias diciendo que sus abuelas también cantaban La molinera, con dos o tres frases diferentes, pero que cantaban esa idea. Hemos sentido que todo el mundo tiene una conexión con su tierra y, además, eso se está dando en la música. Hay muchas propuestas: Tanxugueiras y Baiuca en Galicia, Rodrigo Cuevas en Asturias, Maestro Espada en Murcia, Valerica Castro en Canarias... Mola eso, cuando éramos pequeños aquí se miraba mucho a Inglaterra, a Estados Unidos o a Francia incluso y la música que nos ha venido de ahí es muy guay... Pero ahora se observa un cambio en este siglo, no sé si en esta década, de que nos estamos mirando un poco más a nosotros y también a Latinoamérica, donde compartimos idioma y ciertas cosas.

Este disco está acercando además ese cancionero a diferentes lugares y a miles de personas, ¿es una manera de mantener vivo un legado que quizá, para muchas personas, estaría casi olvidado?

-Por suerte los únicos que lo olvidan suelen ser los políticos y las instituciones, pero hay mucha gente que ha estado desinteresadamente trabajando para que este legado siga vivo. A Antonio José, que fue uno de los compositores más importantes que ha habido en Europa por lo que decían sus coetáneos, lo mataron en la Guerra Civil, en el Golpe de Estado, y su cancionero estuvo oculto y hasta perseguido... Y gracias a la familia, que tuvieron el cancionero escondido, y gracias al trabajo de mucha gente, cuando acabó la dictadura pudo ver la luz en la década de los 80. El caso de Federico Olmeda fue parecido, hizo un trabajo increíble desde el punto de vista de investigación musical, fue alabado fuera de nuestras fronteras y aquí era poco más que un cuadernillo que estaba por ahí... Y este disco sirve para poner en relieve el trabajo de mucha gente de nuestra tierra, no queremos colgarnos ninguna medalla porque ni el folklore ni la tradición nos necesitan para seguir vivos, esto es sólo nuestro pequeño granito de arena.

Cuando llevan ese granito de arena en forma de canciones a los escenarios y ven la respuesta del público, ¿comprueban que el mensaje de estas canciones no ha perdido fuerza?

-Es lo que más nos flipa de la música popular, al final es música que ha sobrevivido porque para la gente significaba algo, no porque saliera en el Spotify, en la tele o en otro sitio. Estos versos eran muy importantes para la gente que los cantaba, eran su verdad y la música siempre ha sido algo muy fundamental en la vida de las personas, esto es una prueba más. Es lo que les acompañaba en el día a día, en momentos la mayoría muy duros, y era su forma también de superar muchas cosas y de celebrar los pocos momentos de celebración que tenían. Para nosotros, tiene mucha fuerza estas palabras.

Estamos además ante un disco ligado a Navarra, ya que ha sido producido por Gorka Urbizu, quien hasta la fecha no había producido ningún disco. Venga, ¿cuánto le ofrecieron para que dijese

-Yo no sé cómo se dejó engañar, pero ha sido la bomba (risas). Ha sido un sueño, éramos como niños en el estudio con alguien al que tenemos muchísimo aprecio en lo musical y a quien después de conocer, hemos empezado a admirar en lo personal. Cualquier grupo tendría que tener el derecho a poder grabar una vez en su vida con Gorka, tendría que ser como un derecho universal y un premio que se diese a la gente, porque es algo flipante. Puede parece un poco exagerado visto así, pero no: es una de las mejores cosas que nos ha pasado como grupo.

Además, musicalmente se nota su influencia en estas nuevas canciones, más crudas respecto a Ninguna Ola

-Sí, todos los productores con los que hemos trabajado tenían una personalidad muy marcada y por eso hemos querido trabajar con ellos: Diego Galaz, Santi García, Raül Refree o Gorka Urbizu han dado su personalidad a las canciones, sabiendo a la vez respetar la identidad del grupo. En este disco cualquiera que haya escuchado a Gorka y a Berri pude encontrar destellos, momentos y meolodías que te reucerdan a él y eso nos parece bonito. Ha hecho un trabajo increíble, nos gustan mucho estas canciones y disfrutamos mucho tocándolas en directo y está habiendo una conexión increíble con la gente, así aquí eternamente agradecidos a Gorka.