El hechizo de Andrea

l pasado viernes, en Condestable, tuvo lugar la presentación en sociedad del primer disco de Andrea Santiago, que lleva por título Prenderle fuego a todo. El álbum, publicado el pasado 20 de mayo, está cosechando atención y alabanzas por parte de la crítica especializada, y no es de extrañar, pues todo en él raya a gran altura. Desde la portada, con preciosa foto de Andrea emulando a Ofelia dentro del agua y en perfecto contraste con el título del álbum, hasta la ejecución instrumental de la banda, pasando, cómo no, por esa manera de componer tan personal que tiene la autora, por sus letras, casi siempre cercanas a la melancolía, así como por su reconocible voz y su forma de cantar. Un soplo de aire fresco en el actual panorama nacional, que en demasiadas ocasiones peca de excesivo mimetismo, y una suerte para ella por contar desde el inicio de su carrera con un sonido tan propio; hay quien se pasa décadas buscándolo sin llegar a encontrarlo jamás.

El acto comenzó con una charla entre el periodista musical Fernando Fernández Garayoa, Andrea, Borja Muerza (batería y productor), y Nacho Muerza (guitarrista). Hablaron de cómo con este disco la autora ha abandonado su zona de confort, y es cierto que se aprecia mucho crecimiento musical desde su primer epé (He dejado de buscar tu casa, 2019), que era mucho más acústico, hasta este debut en álbum largo, que cuenta con una mayor variedad estilística (hay pop, indie, trazas de cantautora, folk o incluso rock y post rock en algunos cortes como La reina de las nieves). Sin embargo, Andrea cuenta con la ya mencionada ventaja de tener un estilo muy marcado que hace que, incluso envuelta en sonoridades tan diferentes, se siga percibiendo con claridad su sello distintivo. En la conversación destacaron también la importancia de banda a la hora de hacer crecer las canciones, a las que gustan de dotar de estructuras épicas, con muchas subidas y estallidos, algo que intentarán trasladar al directo. Hablando de la gira, se han anunciado ya varias fechas por el territorio nacional (Madrid, San Sebastián), y, de momento, hará dos paradas en Navarra (Pamplona el 12 de julio, dentro de la programación de San Fermín, y Tudela el 16 de julio, en el Ribera Sound). En este último festival compartirá cartel con dos de las artistas que han colaborado en este Prenderle fuego a todo: Maialen Gurbindo, alias Chica Sobresalto, que canta en La reina de las nieves, y Anne Lukin, que lo hace en Materia viva, por lo que es bastante probable que repitan la experiencia en directo. En el disco hay una tercera colaboración, la de la cantautora madrileña Yoli Saa, que participa en Las bestias que me acompañan.

Entre todo lo que hablaron, Andrea definió con sus propias palabras lo que es para ella la música: una búsqueda de liberación, una manera de salvarse y de encontrar la verdad. Esa visión visceral queda muy patente en su disco y pudo percibirse también en los cuatro temas que interpretaron: Tundra (con una guitarra eléctrica muy atmosférica y crescendo sonoro), Luces a quemarropa, Pulmón (uno de los singles que anunciaron el disco) y Materia viva (la música alegre hizo un perfecto maridaje con la letra triste). En el disco, las canciones lucen muchas capas sonoras, y fue revelador comprobar que, con un par de guitarras y voz, seguían funcionando y manteniendo intacto todo su hechizo. Esa es la prueba del algodón, la que nunca falla: si una canción es buena, seguirá siendo buena con cualquier traje que su autor quiera ponerle. Es el caso de esta joven artista y de su muy recomendable disco: Prenderle fuego a todo. Si no lo han escuchado todavía, ya están tardando en hacerlo. l