Rodeado de amigos, compañeros, familiares y representantes de parte del sector de la música de Navarra. Así oficializó ayer Aurelio Sagaseta (Ituren, 1935) su renuncia como maestro de la Capilla de Música de la Catedral de Pamplona, puesto que ha ocupado exactamente durante 61 años, siendo el director de coro catedralicio más longevo del Estado.

El maestro estuvo arropado por familiares y amigos. | FOTO: JAVIER BERGASA

La despedida de Sagaseta tuvo lugar en el transcurso de una misa capitular celebrada en la seo pamplonesa y en la que no pudo actuar la Capilla Música al completo, al tratarse de la mañana de un día laborable. Sin embargo, sí acudieron específicamente a la cita cerca de una decena de cantores, varios de los cuales han trabajado durante mucho tiempo con el maestro. Uno de ellos, Martintxo Azpíroz, viajó a la capital navarra desde Leitza para conmemorar la primera vez que ambos cantaron juntos, hace 61 años. Para celebrarlo, volvieron a entonar la misma antífona gregoriana que pide por las mujeres. “Yo quiero hacer los 61 años, ya les dije: no me quitéis antes”, declaraba recientemente Sagaseta a este periódico.

Al finalizar el acto, al que acudieron más personas de lo que suele ser habitual en este tipo de ceremonias, Sagaseta recibió numerosos saludos y felicitaciones por parte de las/os asistentes. Entre ellos se encontraban organistas como José Luis Echechipía; Luis María San Martín, musicólogo y profesor del Conservatorio Superior de Música de Navarra, entre otros. Por supuesto, no faltó Ricardo Zoco, sustituto de Sagaseta al frente de la Capilla de Música de la Catedral de Pamplona.

Aurelio Sagaseta posa con su sustituto, Ricardo Zoco, junto a la fotografía que le regalaron ayer. | FOTO: JAVIER BERGASA Javier Bergasa