Trece años después de su creación, vuelve a Navarra el mural Los dioses nacen de las flores, con el que los artistas Koldo Agarraberes –fallecido en 2015– y Iosu Zapata decidieron unir la culturas prehispánica de México y la vasca preindoeuropea.

Este lunes 8 de mayo, Iosu Zapata llega en avión desde México a Pamplona con este telar de 12 metros de largo que se conservará y exhibirá a partir de ahora en Huarte, localidad natal de Agarraberes.

El Ayuntamiento de Huarte ha posibilitado el traslado de la obra, para la que todavía no se ha decidido un lugar fijo de ubicación. Se baraja la idea de que sea una pieza itinerante, y de momento, la idea es exponerlo al público en el marco de un programa de actividades que abordarán y homenajearán en Huarte la figura de Koldo Agarraberes (1967-2015).

EL ORIGEN, EN EL VALLE DE LA ULTZAMA

Agarraberes y Zapata empezaron a pintar el mural Los dioses nacen de las flores en el año 2009, en el marco del festival-ritual de arte en la naturaleza EMARI09, celebrado en el valle de la Ultzama. Al año siguiente, los artistas navarros tuvieron la posibilidad de concluir esta gran obra sobre tela en una residencia artística en Ciudad de México, en el FARO (Fábrica de Artes y Oficios) de la zona de Tláhuac. Durante estos 13 años, el mural se ha conservado en las instalaciones del FARO, dirigido por Alejandro Rincón.

“Ante el fallecimiento de Koldo Agarraberes y tras el cambio de dirección del FARO Tláhuac, en conversaciones con Alejandro Rincón, vimos necesario asegurar la conservación de la obra y posibilitar su traslado a Navarra, en el que ha colaborado el Ayuntamiento de Huarte sufragando los gastos, con la idea de poder exhibirla y conservarla aquí”, explica Iosu Zapata, artista muy vinculado a México.

Antes de cruzar el Atlántico, el pasado 29 de abril se celebró una fiesta de despedida del mural en México. El taller de Producción El Nidal, que dirige el escultor mexicano Jorge Baca y con el que el artista pamplonés Iosu Zapata colabora estrechamente, organizó el acto, con comida popular, talleres, exposiciones y piñata.

El pasado 29 de abril se organizó una celebración de despedida del mural en México. cedida

KOLDO AGARRABERES, ARTISTA-ACTIVISTA CULTURAL

A partir de la adquisición del mural, el Ayuntamiento de Huarte prepara un programa de actividades culturales en relación a la figura de Agarraberes, que incluirá la presentación del mural con charlas y talleres que se desarrollarán este año en la propia localidad de Huarte.

“La idea es abordar el legado y la memoria de Koldo Agrraberes, artista que formó parte de un movimiento de creadores comprometidos con el ámbito cultural en Navarra que se generó en el pueblo de Huarte a partir de los talleres que impartía Patxi Buldain. En esa escena de las artes visuales se sitúan, junto a Agarraberes, Natxo Barberena, Luis Morea o Pablo Juarros”, comenta Iosu Zapata, quien recuerda a Agarraberes como “un artista y un activista cultural perteneciente a esa generación de los 80, donde lo vivencial en el arte resultaba sumamente importante”.

“Era una persona muy dinámica que conseguía crear puentes de manera muy orgánica entre la escena más underground de Pamplona y la otra escena del arte contemporáneo más formal. Buen ejemplo de ello eran las fiestas que organizaba en su estudio de Mendillorri. Conseguía reunir a músicos, actores y artistas visuales, teniendo también en cuenta la cuestión intergeneracional”, destaca Zapata, impulsor del programa de actividades que se plantea llevar a cabo en Huarte en homenaje a Agarraberes.

“Este tipo de iniciativas en torno a la memoria, en este caso de un amigo y artista, es algo verdaderamente importante, ¡casi un acto subversivo!, en esta sociedad de consumo y redes sociales en que la idea de la inmediatez parece un valor, pero descuidamos cosas realmente importantes”, dice.

“Koldo Agarraberes era una persona muy dinámica, un artista y activista cultural comprometido”

Iosu Zapata - Artista

CHARLAS, ENCUENTROS, TALLERES, EXPOSICIÓN...

Entre las actividades que se plantean, figuran charlas o encuentros para propiciar reflexiones sobre la figura y el proceso artístico de Koldo Agarraberes; talleres educativos experimentales que pondrán el foco en la técnica denominada action painting o pintura de acción, que el artista de Huarte desarrolló durante más de 20 años, así como en las dinámicas colaborativas por las que apostó.

También se plantea dedicarle una exposición individual y retrospectiva que incluya el mural recién llegado de México. Y vincular su figura a proyectos y residencias de EMARI023, acercando el arte a la naturaleza, a las zonas rurales a partir de la idea de lo ritual, a través de instalaciones artísticas efímeras en las huertas y alrededores de Huarte.

REINTERPRETANDO SÍMBOLOS Y ARQUETIPOS

El primer ritual internacional de arte EMARI09, una experiencia de la que Koldo Agarraberes fue el principal activador, abordaba cómo podría ser una obra artística hecha exprofeso para el medio rural, teniendo como principal eje el mito de Mari; así, se planteaba que todas las obras realizadas fuesen como una ofrenda a este mito con la intención de que el proyecto trabajase cuestiones como feminismo, ecologismo, colectivismo y una mirada hacia el mundo rural.

Bajo estas premisas se creó el mural Los dioses nacen de las flores, en el que Iosu Zapata y Koldo Agarraberes vinculan a Mari con las Diosas Olmecas, culturas primigenias de Mesoamérica que rendían culto a la tierra y cuyas diosas eran muy similares a las Venus encontradas en Europa en el Neolítico. “En estas culturas primigenias no hay indicios de dominio, supeditación o discriminación de un género sobre el otro. Nuestro propósito es volver a los inicios, a las culturas anteriores al patriarcado, reinterpretar los símbolos y arquetipos de esta época y actualizarlos pictóricamente”, comentaron los artistas en 2010.

Iosu Zapata vive temporalmente entre Pamplona y Ciudad de México, donde, a través de su proyecto La Chabola Nómada –un habitáculo que creó a modo de mini galería ambulante–, se ha vinculado con colectivos y artistas que están generando tejido social y cultural en la ciudad, y en especial en la colonia Santa María la Ribera, un barrio del centro donde se están asentando artistas, colectivos y galerías de arte.