pamplona - Pastelero y panadero, dice que antes era más goloso y propenso a consumir azúcar que ahora. Es el encargado de poner la nota dulce en la mesa de los Arguiñano. Le gusta su trabajo, le encanta el mundo de la televisión, un camino que abrió su padre. Reconoce que el apellido abre puertas y que muchos le considerarán un enchufado, él aspira a que el reconocimiento sea por méritos propios.

Si nos escapamos con usted, ¿qué veríamos? ¿Qué nos enseñaría?

-Espero que lo mismo que yo, un día divertido, un día en un pueblo de Euskal Herria, un día para conocer a gente, cosas artesanas y naturales.

Tres programas a la semana: Historia a bocados, Escapada con Joseba Arguiñano y Sukaldaria. ¿Que tiemble Karlos Arguiñano?

-Ja, ja, ja? No, mi padre es insustituible. Él hace un programa muy diferente a lo que yo hago. Karlos Arguiñano es brutal en televisión. A mí, me gusta estar más en la calle, con la gente y descubrir lugares, rincones especiales de los pueblos a los que vamos.

¿Le ha enseñado algún chiste?

-No. Soy más tímido, por ahora?

Solo por ahora, ¿no? Después está dispuesto a pillar a su aita.

-Claro que no. Eso va a ser imposible. Mi faceta de cara a la tele es más tímida que la de él. ¿Contar chistes? Por el momento nada. No sé si llegará algún día.

Podemos decir que de tal palo, tal astilla.

-Lo nuestro es alimentar a la gente, y nos gusta. Podemos decir de tal palo tal astilla, pero hay diferencias en lo que él hace en televisión y lo que yo hago. Pero también hay elementos comunes, a mí me gusta enseñar lugares como al aita le gusta enseñar sus recetas. Nos gusta mostrar las cosas buenas a la gente.

Dicen que de todos sus hermanos es usted el que más se parece a Karlos Arguiñano.

-Creo que cada uno de nosotros tenemos un toque de él. Es cierto que me parezco en muchas cosas al aita, pero también tengo el toque quisquilla y me parezco a la ama en eso.

¿Es crítico con sus programas o le da jabón?

-Me da jabón, lo ha hecho toda la vida, es lo que hay que dar a la gente para que disfrute?

Pensaba que Arguiñano padre era más cañero.

-Lo es. Me da detalles como profesional. Me dice cosas con las que puedo mejorar, pero ante todo, me anima a que sea yo mismo y a que disfrute.

¿Le hace caso?

-Por supuesto. Soy como me veis, me pasa igual que a mi padre, no podemos fingir lo que no somos. Pienso que la gente se lo pasa bien viéndonos, y eso es lo importante.

¿Pensaba que iba a hacer carrera televisiva?

-Llevo muy poco tiempo. No sé si esto es carrera televisiva. Lo veremos con el tiempo. Nadie sabe cómo saldrá este invento.

¿Le da tiempo a tener tres programas en televisión y a trabajar en su panadería?

-Tengo días complicados, me voy amoldando poco a poco; tengo un buen equipo y eso me permite ir a grabar el tiempo que necesite sin muchos problemas. Lo estamos haciendo bien, llevamos todos los trabajos adelante. Estoy más ocupado y nos estamos haciendo a ello.

Recomiéndenos momentos dulces y salados para afrontar la primavera.

-Recomiendo lo que hago en casa o con los amigos en la sociedad, comidas de temporada y saludables. Es también lo que hago en televisión, gastronomía sana y rica de los sitios que visitamos. Los momentos dulces o salados son aquellos en los que cocinamos algo rico.

¿Qué le lleva a decidirse más por lo dulce que por lo salado?

-Es que siempre he sido muy goloso. Cuando yo entré en la cocina era muy chaval y me gustaba mucho lo dulce. Con 17 o 18 años te gusta el deporte, te gusta el azúcar para que te dé energía. El azúcar siempre ha ido ligado más con los chavales. Ahora lo uso más para los fines de semana, días especiales.

¿Cuál es su postre favorito?

-Una pantxineta, un hojaldre y ahora que estamos tirando para el verano, también me encanta algo cítrico. Estamos en primavera y me gustan sus frutas, unas buenas fresas?

¿Hay algún plato que no comería ni por todo el oro del mundo?

-No. Lo que no está en condiciones. Cualquier producto bien cocinado, yo me lo como. Un pescado en malas condiciones, una salsa mal ligada o un producto que está pasado de cocción?, pues no, no me hace gracia comerlo.

Una pregunta tópica, ¿la cocina del aita o de la ama?

-Los dos cocinan muy bien, cada uno tiene sus especialidades. Hacen mucho en conjunto, la ama prepara, el aita remata; son un buen equipo y es eso lo que nos han enseñado a los hijos, a ser equipo.

Hablemos del programa de ETB 1, Sukaldaria.

-Es un programa que, igual que Escapadas, se parece también a Historias a bocados. Los tres tienen mucho en común, vamos de pueblo y hablamos con la gente.

Veo que le gusta mucho hablar con la gente.

-Me encanta, soy muy charlatán. Lo único diferente que tiene este programa es el idioma, en lo demás tienen muchos puntos en común.

Van a decir de usted que es un enchufado.

-Está claro que hay ayuda, me apellido Arguiñano.

Y eso abre puertas, ¿no?

-Arguiñano en la tele y en la cocina vale para un enchufe. Pero lo que importa es que a la gente le tiene que gustar lo que hago tanto en la televisión como en la cocina; el ser Arguiñano no me va a servir de nada si a la gente no le gusto. Me van a comparar, van a decir que soy un enchufado, pero es lo que hay, qué le vamos a hacer. Procuro hacerlo lo mejor que sé, voy aprendiendo y estoy satisfecho. Es mucho trabajo y me lo curro.